martes, 29 de noviembre de 2011

Tiroteo en el Barrio Don Bosco


EL TRIBUNAL ENCONTRÓ RESPONSABLE A ROSALES Y ABSOLVIÓ A ULLOGA

El tribunal colegiado declaró responsable de dos homicidios en grado de tentativa, lesiones graves y lesiones leves a Cristian Javier Rosales, en tanto que lo absolvió de los delitos de portación de arma de fuego, entrega de arma de fuego a quien no es legítimo usuario, privación ilegal de la libertad agravada por su comisión con violencia y amenazas, delitos por los que también lo había acusado el fiscal. Por su parte Gustavo Ulloga fue absuelto por todos los cargos. La Dra. Carina Estefanía votó en disidencia declarando la responsabilidad de Rosales y Ulloga en relación al delito de amenazas agravadas por el uso de armas. La magistrada también votó en disidencia encontrando responsable Rosales en el delito de entrega de arma de fuego a quién no es legítimo usuario. Fernando Rivarola ya analiza la presentación de un recurso ante el Superior Tribunal de Justicia.

Los tres magistrados, aunque con diferentes consideraciones, analizaron todos los testimonios considerando que tanto los relatos de los testigos como los de los imputados cuentan con tramos verídicos y otros que caen frente al resultado de la prueba pericial. En relación a los primeros, consideraron que la intención de no dejar involucrado a Fabián Leiva en una conducta que pudiera ser penalmente responsable, la confusión reinante al ver a sus familiares gravemente heridos, el riesgo cierto para la propia vida, y el consumo previo de alcohol, son factores que pueden explicar cierta falta de precisiones y confusión en la secuencia real de los sucesos.
Del lado de los imputados, obviamente la intención fue quedar mejor parados ante la sanción penal que les tocaría enfrentar.

Contrastes

Los jueces encontraron debidamente probado que no era cierto que los imputados no conocían a los hermanos Leiva y su grupo, y que estos últimos los habían provocado y amenazado con agredirlos a ellos, su casa y su familia. Ambos grupos se conocían de un local nocturno en el que se encontraban todas las noches. No solo esto sino que la madrugada del 24 de octubre de 2010, Rosales y Oscar Castro mantuvieron una fuerte discusión en ese local. Tampoco sería cierta la versión de las víctimas al indicar que al llegar a la rotonda del Barrio Don Bosco los imputados los aguardaban armados, sino que estos habrían llegado instantes después. Algo similar sucedió con la versión de Rosales al asegurar que nunca pretendió matar a Fabián y a Matías Leiva. La prueba pericial y la que él mismo arrimó para demostrar su destreza en el manejo de las armas da cuenta de lo contrario. Los jueces no dudaron en que su intención fue matar pero no lo logró por circunstancias ajenas a su voluntad.
“La puntería de Rosales ha sido abrumadoramente probada en el juicio, siendo que la defensa quiso probar ese extremo. Cabe deducir de ello que cuando Rosales quiso apuntar a las piernas pegó en las piernas, y cuando quiso impactar más arriba impactó allí adonde dirigió la mira”, expuso Martín O´ Connor.
Tampoco se probó en el debate que el grupo de las víctimas estuviera armado como plantearon los imputados, ni que Rosales se hubiera mantenido estático durante todo el desenvolvimiento de los hechos, sino que por el contrario se evidenció su desplazamiento con dominio de la situación.

Legítima defensa de terceros

Tal como lo planteó la Fiscalía, el accionar de Fabián Leiva fue tomado por el Tribunal como un accionar encuadrado en la legítima defensa de terceros ya que sus hermanos estaban siendo apuntados con armas de fuego. Recordemos que Fabián había llegado corriendo, armado, en defensa de sus hermanos al ser alertado por la novia de uno de ellos sobre lo que estaba pasando. Fabián hirió en el pecho a Rosales, este le disparó a su pierna y posteriormente, y con mayor proximidad, a la cabeza. El primer disparo de Rosales fue tomado por los magistrados como estado de necesidad exculpante. Sin embargo a partir de allí se descartó plenamente una situación de legítima defensa. “Ante piedras respondió con tiros en las piernas, falta de racionalidad del medio empleado, luego en un accionar que no podría ser justificado por ningún tribunal del mundo y menos por el tribunal del sentido común, se acercó a dos personas heridas y desde una corta distancia literalmente los fusiló. Que la muerte no haya protagonizado el final del cuento se debe únicamente a circunstancias rayanas a lo milagroso, pero que semejante acto pretenda verse amparado por una causa de justificación ha de ser desterrado sin hesitación alguna”, indicó O’Connor.

Disidencia y agravio


Los puntos de disidencia que tuvo la Dra. Carina Estefanía en la sentencia, serán probablemente los principales agravios planteados por el fiscal a la hora de elaborar su recurso. La magistrada al deliberar con sus pares planteó la posibilidad de reabrir el debate para darle la oportunidad a la defensa de alegar en relación al delito de amenazas agravadas por el uso de armas, una calificación alternativa presentada por la Fiscalía a lo largo del proceso, en el alegato de apertura, en la descripción de los hechos durante el alegato final, pero que no explicitó al momento de pedir la declaración de responsabilidad por última vez al cierre del debate. Estefanía consideró que en este caso están dados los supuestos necesarios para que el tribunal declare la responsabilidad de ambos imputados por ese delito, de hecho ella lo propuso en su voto minoritario, pero que como buena práctica, para extremar la posibilidad de defensa de los imputados y evitar posibles planteos de nulidad, lo ideal hubiese sido la reapertura del debate. Su postulación no fue acogida por Javier Allende y Martín O´ Connor, y por lo tanto Rosales y Ulloga resultaron absueltos de ese primer tramo de los hechos.

La pena

Con el encuadre de las escalas penales de los delitos por los que fue encontrado responsable, Cristian Rosales deberá afrontar una nueva audiencia de debate, en este caso para la determinación de la pena que se le impondrá. La fecha de la audiencia será próximamente fijada por la Oficina Judicial.

Nuevos hechos

LESIONES GRAVES:
El sábado a la madrugada se generó una discusión en la calle entre unos sujetos que regresaban del boliche. Uno comenzó a disparar y el otro resultó con una herida sobre la ceja. El proyectil quedó alojado en el cráneo. Otro, le impactó en el glúteo. Sucedió en el Barrio Ceferino, Esquel.

ABIGEATO:
Autores ignorados sustrajeron dos animales bovinos de un campo en Corcovado. Sucedió el domingo.

HURTO:
Un vecino de Cushamen denunció que le sustrajeron dos rollos de alambre de 1000 mts. cada uno de su patio. Sucedió entre la noche del 20 y la mañana del 22.

ROBO:
Autores ignorados rompieron una ventana y sustrajeron un DVD Sony y un bolso. Sucedió en El Hoyo el viernes por la tarde.

AMENAZAS – LESIONES
En una sesión del Concejo Deliberante de El Hoyo se produjo una situación en la que un grupo de tres concejales denunciaron que se les impidió salir del recinto, llamaron a la policía y mientras esta llegaba fueron amenazados. Una vez saliendo, con cordón policial, uno de los denunciantes resultó lesionado por las patadas que arrojaba el público. Sucedió el viernes a las 20:15 hs.

HURTO:
Un vecino de Lago Puelo denunció que le sustrajeron de una construcción una caja de herramientas. Sucedió entre la tarde del viernes y la mañana del sábado.

ROBO:
Autores ignorados rompieron la ventana de una vivienda, ingresaron y sustrajeron un cuchillo y la luz de emergencia. Ocurrió en Lago Puelo entre el jueves y el sábado.

ROBO:
Autores ignorados violentaron la puerta trasera de una vivienda y sustrajeron dos cámaras digitales y una notebook. Ocurrió el viernes por la mañana en Chacabuco al 900, Esquel.

HURTO:
Entre el viernes y el sábado, autores ignorados forzaron la puerta de una vivienda, ingresaron y sustrajeron un plasma de 42’ y un arma de fuego. Ocurrió en Almafuerte al 1000, Esquel.

LESIONES CULPOSAS:
El domingo a las 17 hs. se produjo un choque entre tres vehículos en la ruta que comunica Esquel con Trevelin. El conductor de uno de los vehículos se habría perdido el control del rodado pasándose a la mano contraria, rozando el vehículo que venía de frente ya que este se tiró a la banquina. El tercer vehículo al ver las maniobras se tiró en sentido contrario y también fue impactado, resultando sus ocupantes con lesiones graves.

ROBO:
Autores ignorados sustrajeron una garrafa de 10 kg que estaba conectada en el exterior de la vivienda, previo romper y cortar los caños. Sucedió en Gualjaina el sábado.

HURTO:
Una mujer de avanzada edad denunció que ingresaron a su vivienda y sustrajeron dinero en efectivo. Sucedió en Urquiza al 1800, Esquel, el lunes por la mañana.

HURTO:
Un vecino de A. P. Justo (Esquel) denunció que, entre la noche del viernes y la mañana del sábado, le sustrajeron herramientas que tenía guardadas en su vehículo.

HURTO:
Autores ignorados sustrajeron una bicicleta a un chico mientras esta compraba en un kiosco ubicado en Roca y Ameghino, Esquel. sucedió el martes a las 7:50 hs.

viernes, 25 de noviembre de 2011

Mujer y derechos

VIOLENCIA DE GÉNERO

Los efectos de los pactos internacionales a los que suscribió la Argentina se hacen sentir a la hora de discutir medidas en los tribunales locales. En los últimos días fue rechazado un ofrecimiento de reparación y de suspensión de juicio a prueba en relación a una causa por incendio intencional por considerar que trata de una situación de violencia de género, y se dictó una prisión preventiva en una investigación de violencia de género y maltrato infantil.

Todo acto de violencia basada en la pertenencia al sexo femenino que tenga o pueda tener como resultado un daño o sufrimiento físico, sexual o psicológico para la mujer, así como las amenazas de tales actos, la coacción o la privación arbitraria de la libertad, tanto si se producen en la vida pública como en la vida privada, es violencia de género según la Declaración de Naciones Unidad sobre la eliminación de la violencia contra la Mujer.
Por otra parte la Ley de Protección integral de las Mujeres está destinada a prevenir, sancionar y erradicar la violencia contra las mujeres en los ámbitos en que se desarrollen sus relaciones interpersonales-considera violencia contra las mujeres toda conducta, acción u omisión, que de manera directa o indirecta, tanto en el ámbito público como en el privado, basada en una relación desigual de poder, afecte su vida, libertad, dignidad, integridad física, psicológica, sexual, económica o patrimonial, como así también su seguridad personal.
Estos criterios fueron planteados por la Dra. María Bottini en ambos casos, y los jueces los contemplaron a la hora de dictar sus resoluciones. Particularmente la Dra. Anabel Rodríguez a la hora de definir si podía otorgarse al imputado la posibilidad de acceder a soluciones alternativas del conflicto cuando la damnificada no estaba de acuerdo.

Los casos

El 29 de enero de este año un hombre le envió un mensaje de texto a una mujer con la que había mantenido una relación amorosa, amenazándola de muerte. El mismo día a las 6:30 hs. el imputado fue a una estación de servicio, compró combustible en una botella plástica y luego se dirigió a la vivienda donde vive la víctima con sus hijos, arrojó el contenido de la botella en el altillo y prendió fuego. Las llamas afectaron buena parte de la vivienda y de los bienes que estaban en su interior.
Ese mismo día una juez penal dictó una prohibición de acercamiento en un radio de 100 mts. El imputado desobedeció esa orden en más de una oportunidad. Por todos estos hechos la Fiscalía realizó una investigación y presentó acusación pública por los delitos de amenazas, incendio con peligro común para los bienes y desobediencia.
La defensa intentó realizar una conciliación pero la víctima no quiso. Luego ofreció una reparación económica de cinco mil pesos, que tampoco fue aceptada por la víctima y pidió la implementación de una suspensión de juicio a prueba ya que el imputado reúne los requisitos legales.
Ese argumento fue rebatido por la Fiscalía planteando que se estaría incumpliendo con los compromisos internacionales asumidos por el Estado.

El otro caso ocurrió recientemente en una localidad del interior provincial. El imputado comenzó a golpear a uno de sus hijos causándole lesiones. Luego agredió a su mujer, mediante golpes en todo el cuerpo. Otro de los chicos se interpuso y lo golpeó también. La mujer avisó a la policía e intentó salir en busca de auxilio pero el imputado se lo impidió cerrando puertas y ventanas, manteniendo a los tres privados de su libertad durante dos horas. Al llegar la policía, el imputado en lugar de calmarse se tornó agresivo con los agentes, intentando quebrar el brazo de una policía, además de atacar con un cuchillo a otro, sin consecuencias gracias al chaleco antibalas que llevaba.
En la audiencia, una vez mas la Dra. Bottini señaló que se trata de un caso de violencia de género, además del evidente maltrato infantil. Fundamentó los peligros procesales de fuga y entorpecimiento de la investigación y el juez dispuso la prisión preventiva.

jueves, 24 de noviembre de 2011

Nuevos hechos

HURTO:
Autores ignorados sustrajeron un taladro, dos palas y una picota de un campamento de Vialidad Provincial. Sucedió entre principios de noviembre y el 23 del mismo mes en Esquel.

HURTO:
Un vecino de Trevelin denunció que le sustrajeron seis ventanas y una puerta de una obra en construcción ubicada sobre la Ruta 71. Ocurrió entre el jueves y el miércoles últimos.

HURTO:
Autores ignorados sustrajeron dinero de la habitación de un hotel a una turista. Ocurrió el miércoles entre el mediodía y la tarde en Trevelin.

martes, 22 de noviembre de 2011

Nuevos hechos

LESIONES GRAVES CULPOSAS:
Este martes aproximadamente a las 11:30 hs. se produjo la colisión de una camioneta Toyota Hilux con un Ford Falcon en la intersección de Avda. Alvear y calle Molinari, Esquel. Producto del choque el conductor del Falcon resultó con fractura de cadera.


HURTO:
Autores ignorados sustrajeron un celular a una alumna de la Escuela 767. Sucedió el lunes a la tarde.

HURTO:
Una vecina de Pellegrini al 1200 denunció que le sustrajeron su bicicleta del patio de la vivienda, el lunes a la mañana.

HURTO:
Un constructor denunció que le sustrajeron siete ventanas de un complejo de departamentos que está construyendo en Owen Jones entre Ameghino y Chacabuco, Esquel. Sucedió entre el sábado y el lunes últimos.

ROBO:
Un vecino del Paraje Los Cipreses denunció que le forzaron la puerta placa y le sustrajeron una motosierra y otras herramientas. Ocurrió el martes 15 por la noche.

lunes, 21 de noviembre de 2011

Abuso de armas

EL DOMINGO SE FORMALIZÓ LA INVESTIGACIÓN

Una persona resultó herida de arma de fuego en Río Pico. El presunto autor de los disparos fue aprehendido y trasladado a Esquel para su presentación en los Tribunales.

El sábado a las 21:30 hs. un joven le disparó al menos tres tiros a otro sujeto, impactando en su muslo izquierdo, en la pierna izquierda y en la pierna derecha a 8 cm del tobillo. La policía secuestró un revolver calibre 32 largo que sería el utilizado por el imputado.
El imputado declaró en la audiencia sosteniendo que actuó en defensa propia y de su familia.
Con acuerdo entre el representante de la Fiscalía y el de la Defensa, el juez dispuso una prohibición de acercamiento entre los protagonistas del hecho, a no menos de 100 mts.

Nuevos hechos

LESIONES CULPOSAS:
El jueves por la tarde se produjo un fuerte aguacero con granizo sobre la Ruta 40 km 1733, entre Esquel y Tecka. Una Toyota viajaba con tres personas y el conductor perdió el control del rodado. Uno de los ocupantes resultó con fractura de clavícula.

ROBO
Autores ignorados rompieron la puerta de ingreso a una vivienda y sustrajeron un televisor LG, un DVD, y un porta traje. Sucedió el viernes por la tarde en Avellaneda al 1600, Esquel.

DAÑO Y HURTO:
Autores ignorados rompieron un vidrio y sustrajeron la rueda de auxilio, una llave cruz y otra llave del baúl de un vehículo que estaba en el patio de una hostería en construcción. Sucedió el viernes a partir de las 18 hs. en Lago Puelo, sobre la Ruta 16.

HURTO:
El jueves pasado se constató el faltante de 70 mts. de manguera para riego del Boulevard de la avenida en Lago Puelo.

HURTO:
Autores ignorados se llevaron una motobomba del patio de una vivienda entre la mañana y la tarde del viernes, en Mitre al 50, Esquel.

DAÑO:
Autores ignorados rompieron el candado y la tranquera de un campo. Fue constatado este sábado a la mañana en Tecka.

ATENTADO A LA AUTORIDAD:
Dos grupos grandes se enfrentaron en la puerta de un local bailable, la policía vio que un sujeto portaba un cuchillo e intentó detenerlo. Cuando esto sucedía integrantes de los dos grupos se tiraron contra la policía.

INCENDIO:
El domingo a las 7:20 hs. resultó incendiado un vehículo en Fontana al 100, Esquel.

ABIGEATO:
Autores ignorados sustrajeron 6 corderos de un galpón en El Hoyo, sucedió entre el viernes y el sábado.

sábado, 19 de noviembre de 2011

Tiroteo en el Barrio Don Bosco


CARTAS SOBRE LA MESA

El sábado por la mañana las partes presentaron sus alegatos. El fiscal expuso un pormenorizado análisis de la prueba, los motivos que lo llevan a considerar que el accionar de los imputados no tiene justificación y por lo tanto deben responder por todos los delitos por los que fueron acusados. El defensor sostuvo que es clave considerar quién disparó primero, sumado a que sus defendidos fueron amenazados y esperaban ser agredidos, por lo que actuaron en legítima defensa. La lectura de sentencia se realizará el martes 29 a las 8 hs.

En su introducción Fernando Rivarola relató que en ese mismo momento su hijo y el hijo del imputado Cristian Rosales comparten un partido de fútbol jugando para el mismo equipo, y en alguna oportunidad estuvo sentado junto al imputado en la misma tribuna acompañando cada uno a su hijo. Este relato que parece no tener nada que ver con el hecho que se está juzgando, fue tomado como ejemplo por el fiscal para que el tribunal comprenda el grado de compromiso personal que tiene con la prueba, que según su lectura es contraria a las pretensiones de Rosales.

Marchas y contra marchas

El acusador señaló que los imputados viraron su versión de los hechos, desde la primera declaración a la dada en el debate, para hacerla compatible con la prueba objetiva, sin embargo no habrían logrado encajar claramente sus dichos en el molde trazado por los elementos objetivos recabados.

Los Leiva

Un apartado especial mereció en el alegato fiscal la referencia a quiénes son las víctimas y que prejuicios pueden jugar en su contra en este caso. Los hermanos Leiva son un grupo familiar grande. Rivarola indicó que algunos de ellos han estado vinculados a hechos delictivos, pero no los que en este caso son víctimas. También señaló que aunque se tratase de personas que suelen cometer hechos delictivos, eso no justifiría que sean agredidos del modo en que lo fueron. Agregó también que los imputados se refirieron siempre al grupo como “los Leiva”, siendo que en realidad no estaban solo ellos sino que había otras personas y que de hecho el problema que detonó toda la situación fue originado por Castro.

La intención de matar


Entre los delitos imputados, Rivarola acusó a Rosales de tentativa de homicidio en relación a dos de las víctimas. Uno de los primeros elementos que consideró es lo dicho por Rosales al primer policía que llegó al lugar de los hechos “no los quise matar”. Qué necesidad tendría de decir esto si los disparos hubieran sido dirigidos a las piernas de las víctimas y no a zonas vitales, se preguntó el fiscal, sabiendo que Rosales es un experto tirador.
También señaló Rivarola que es falso que el imputado estuvo parado en la esquina que el sostuvo en sus declaraciones, ya que se encontraron vainas de proyectiles disparados por su arma en otros sectores, compatible con la descripción de sus movimientos dada por las víctimas.

Si todos se defendieron ¿Cuál defensa fue legítima?

En distintos tramos de su alegato, Rivarola se refirió a situaciones de legítima defensa. Analizó estas en relación a actores de uno y otro bando. En la secuencia de los hechos se constató que había habido una discusión entre Castro y Rosales. Cuando caminaban en proximidades a la estación de servicio Shell, Rosales y Ulloga marchaban detrás del otro grupo. Castro los encaró, discutieron y aparentemente esa situación se resolvió y caminaron todos juntos algunos metros. Al llegar al Barrio Don Bosco se separaron. Los imputados fueron a la casa de Rosales y se hicieron de dos armas largas para salir al cruce del grupo. Rivarola sostiene que si el grupo tuviera la intención de agredir a Rosales o a la vivienda de este, podría haber llegado antes ya que iban por el camino más corto, sin embargo no lo hicieron. Fueron ellos los interceptados en la rotonda.

A criterio de Rivarola la prueba existente avala la versión de las víctimas, particularmente la de Lucía Regolledo que es quién se resguardó en el patio de una vivienda ubicada a unos 50 mts del lugar, y desde allí con su celular hizo varios llamados al 101 y dos llamadas a Fabián Leiva. Fabián corrió del lugar en el que estaba a su domicilio, se hizo de una pistola y corrió 300 mts hasta la rotonda para auxiliar a sus hermanos y a los amigos de estos. Mientras tanto los imputados los tendrían encañonados contra la pared de una vivienda, los amenazaba y amedrentaban con las armas. Con la llegada de Leiva los imputados sostienen que las víctimas le dijeron que “los baje”, que les dispare. Estos sostienen que Rosales le disparó en un pie a Fabián y él cayó al piso, se arrastró y desde allí intentó defenderse disparando. Rosales sostiene que primero disparó Leiva y él respondió a esos disparos ya que lo había herido.
Los imputados también dicen que había varias armas y que les disparaban de todos lados. Sin embargo las vainas encontradas solo dan cuenta de tres armas. Las dos armas largas que tenían los imputados, y la pistola de Leiva.

Con la llegada de Fabian, el grupo corrió por calle Sarmiento para resguardarse, mientras lo hacía vieron caer a Fabián y regresaron para ayudarlo defendiéndolo a él y a ellos mismos con lo único que tenían para hacerlo, tomando piedras de la calle y arrojándolas contra los imputados. Rosales realizó varios disparos e hirió a Oscar Castro, a Ramiro Leiva y a Matías Leiva. A este último uno de los proyectiles le ingresó por una axila y se le alojó en la columna dejándolo parapléjico.
Cuando Fabián ya estaba tirado en el piso le disparó a la cabeza, según el análisis de la prueba pericial valorado por el fiscal se encontraba ya sin municiones. Fabián se cubrió con sus manos y giró el rostro instintivamente. Esto hizo que la bala rozara una de sus manos y la cabeza, sin ingresar en la cavidad.
El imputado sostiene que Fabián estaba disparando desde el piso, que él le disparó a la mano para que arrojara el arma y por la posición que tenía la bala le rozó la cabeza. La trayectoria del proyectil sería compatible con la versión de la víctima y no con la del imputado según el análisis fiscal.
Rivarola sostuvo que el único que actuó en legítima defensa de terceros fue Fabián, que llega armado porque a sus familiares y amigos los tenían encañonados diciéndoles que los iban a matar. A partir de allí no importa quién disparó primero porque Leiva estaba excusado por la ley para disparar.
Sin embargo Rosales no intentó ninguna otra forma de defenderse si pensaba que iban a agredirlo. No llamó a la policía, no se atrincheró en su casa, no escapó, sino todo lo contrario, salió armado al cruce de un grupo que estaba desarmado.

Madrugada trágica

Esto ocurrió un domingo a la madrugada, en ese mismo momento en el Barrio Ceferino se producía otro tiroteo en el que resultó una persona fallecida, además del atentado contra una vivienda con un incendio automotor, en otro sector de la ciudad. En el hospital de Esquel ingresaron paralelamente doce personas heridas y en sus instalaciones se encontraron familiares de víctimas y victimarios. También se puso a prueba la capacidad de respuesta de la policía y de la propia fiscalía que debió abrirse ese domingo con el 50% de su personal trabajando en dos equipos, uno con cada hecho.

La calificación

La lista de delitos en los que la Fiscalía encontró que encuadra la conducta de los imputados parece inacabable. A Rosales le imputó la portación ilegal de arma de uso civil, atenuada para por ser legítimo usuario, en concurso real con entrega de arma de fuego a quien no es legítimo usuario. Privación ilegítima de la libertad con uso de violencia y amenazas, prolongada hasta el arribo al lugar de Fabián Leiva, lo que a criterio de la Fiscalía demandó no menos de cinco minutos. Lesiones graves y leves en relación a tres de las víctimas, y tentativa de homicidio de Fabián Leiva y Matías Leiva. Dos calificaciones provisorias aportó el fiscal: la de coacción para el caso en que el tribunal no considere que existió privación de la libertad, y la de lesiones gravísimas si considera que no se encuentra probado alguno de los extremos de la tentativa de homicidio de Matías Leiva.
Por su parte a Gustavo Ulloga lo acusó de portación ilegal de arma de uso civil en concurso real con privación ilegal de la libertad agravada por su comisión con violencia y amenazas, en calidad de coautor, lesiones graves a Fabian Leiva como partícipe necesario, lesiones graves, leves a Matías Leiva, Oscar Castro y Ramiro Leiva en carácter de coautor, tentativa de homicidio a Fabián y Matías Leiva en calidad de partícipe necesario.

El derecho de las víctimas

Al cerrar su alegato Rivarola se refirió al derecho de acceso a la justicia y tutela judicial efectiva que tienen las víctimas, y les agradeció a estas el acompañamiento al Ministerio Público y la manera en que se pudo realizar el debate, sin nuevos conflictos entre las partes.

La defensa

Daniel Sandoval realizó un alegato breve, descansando en las versiones ya dadas por sus defendidos a lo largo de la investigación y del propio juicio. Se apoyó en la declaración de un gendarme señalando que su percepción da cuenta de que quién habría disparado primero sería Fabián Leiva e intentó plantear que la secuencia de los hechos fue otra diferente a la llevada por la Fiscalía. Indicó que Leiva habría llegado mucho antes y que Rosales y Ulloga solo atinaron a defenderse de un ataque inminente. En este sentido descartó la privación de la libertad al grupo de las víctimas y dijo que la diferencia numérica da cuenta de la superioridad del grupo de quienes se presentan como víctimas respecto de los imputados.
También sostuvo que el agredido fue Rosales, que su vida se vio en peligro así como la de Ulloga, y que considerando la capacidad y destreza en el manejo de las armas que demostró Rosales, si hubiera querido matar a los integrantes del grupo contrario lo hubiese hecho, sin embargo solo quiso defenderse de la agresión que estaba sufriendo.
“No quisieron amenazar, sino confrontar y colocarse en pie de igualdad con los otros”, dijo el letrado.
Finalmente Sandoval consideró que la agresión previa existió, Leiva disparó primero y esto puso a Rosales en situación de legítima defensa de su vida y la de su compañero. Por esos fundamentos solicitó la libre absolución de ambos imputados.

jueves, 17 de noviembre de 2011

Tiroteo en el Barrio Don Bosco

EL SÁBADO LAS PARTES HARÁN SUS ALEGATOS

Este jueves se escuchó la declaración de una testigo, se reprodujo el audio de la declaración de los imputados en una audiencia de febrero de este año, y también el video de la ampliación de esa declaración realizado en la escena de los hechos. El sábado a las 8:00 hs. el Lic. en Criminalística Leonardo Ehnes ampliará su declaración y con posterioridad las partes expondrán sus alegatos al tribunal.

Se espera que los alegatos no sean breves. Tanto la Fiscalía como el defensor particular procurarán hilvanar toda la prueba testimonial producida en el debate para fundamentar sus peticiones. Rivarola pedirá que tanto Rosales como Ulloga sean declarados culpables de los delitos por los que los llevó a juicio, en tanto que Daniel Sandoval intentaría convencer al Tribunal de que sus representados estaban habilitados para actuar como lo hicieron, en defensa propia, de su familia y de sus bienes.

Luego de los alegatos el Tribunal conformado por la Dra. Carina Estefanía, Javier Allende y Martín O’Connor, cuenta con cinco días hábiles para deliberar y redactar su sentencia.

miércoles, 16 de noviembre de 2011

Tiroteo en el Barrio Don Bosco


JUICIO EN MARCHA

Desde el lunes se está realizando el juicio en la causa que investiga el tiroteo ocurrido el 24 de octubre a la madrugada en el barrio Don Bosco (Esquel). El enfrentamiento entre dos sujetos armados y un grupo de seis personas, finalizó con cinco heridos de bala, uno de ellos parapléjico, dos heridos graves y un herido leve del grupo de las víctimas, y uno de los imputados también con una herida de carácter leve.


AUDIO Fernando Rivarola

AUDIO Daniel Sandoval

Fernando Rivarola es el Fiscal que lleva la investigación, en su alegato de apertura describió los hechos diciendo que sucedieron el domingo 24 de octubre de 2010 a las 7:00 hs., luego de que dos grupos salieran de un boliche bailable ubicado sobre calle Belgrano entre Alvear y 9 de Julio. Uno de estos grupos, que estaba compuesto por Nestos Rubén Pallalef, Rubén Pallalef, Elvio Matías Leiva, Ramiro Leiva, Oscar Castro y Lucía Regolledo, fue interceptado en la intersección de Alvear y 25 de Mayo por otro grupo integrado por Cristian Rosales y Gustavo Ulloga.
Rivarola sostiene que estas dos personas habían tenido problemas con Castro, discutieron, los invitaron a pelear, y luego caminaron todos por 25 de Mayo hacia el Barrio Don Bosco, donde vive la mayoría de estas personas.
Al llegar a la Diagonal Castellani, Rubén Pallalef siguió hacia su casa, y el resto del grupo toma por esa arteria hacia el domicilio de Lucía Regolledo. Rosales y Ulloga caminaron por 25 de Mayo, en dirección al domicilio del primero. Cuando el primer grupo llegó a la rotonda, fue sorprendido por los otros dos que portaban armas largas tipo rifle, los encañonaron amenazándolos de muerte y los hicieron colocarse contra la pared de una vivienda, indicándole a Lucía que se vaya porque si no la mataría. Cuando ella se fue, los imputados mantuvieron encañonado al resto del grupo profiriéndole amenazas de muerte: “no nos importa matarlos”, “los vamos a matar”, además de gatillar con las armas, apuntarlos, golpearlos con los extremos de los caños. En ese contexto acudió en auxilio de las víctimas, Fabián Leiva, armado, luego de haber sido alertado por Lucía. Rosales y Ulloga lo recibieron con disparos y al menos uno de estos lo alcanzó dejándolo tendido en una de las esquinas. Los integrantes del primer grupo intentaron huir en dirección contraria, mientras lanzaba piedras contra los dos atacantes en defensa propia y de Fabián. Estos últimos responden con disparos contra el grupo, dirigidos hacia la zona baja del cuerpo, logrando impactar a Ramiro, Oscar y Matías.
Cristian Rosales, sabiendo que Fabián Leiva estaba herido y sin posibilidad de defenderse, se aproximó a este y desde corta distancia le efectuó un disparo a su cabeza. Luego se acercó a Matías, también herido, y le disparó al centro del cuerpo.
Matías Leiva fue herido de tres disparos y quedó parapléjico. Los otros integrantes del grupo quedaron dos con lesiones graves y uno con una lesión leve. Por su parte Cristian Rosales recibió un disparo que le provocó lesiones leves.

Muchos protagonistas, muchas conductas

Rivarola anticipó a los jueces que se trata de un hecho sumamente complejo por la cantidad de protagonistas, por el despliegue de cada uno de ellos y por el modo en que unas acciones se producen en consecuencia de otras llevadas a cabo previamente.
Respecto de Fabian Leiva, Rivarola explicó que la Fiscalía no dudó en justificar su intervención armada amparada en la legítima defensa de terceros y propia.
El fiscal señaló que la calificación también generó largas discusiones en el ámbito del Ministerio Público, y sostuvo que este también será un punto a analizar cuidadosamente durante el debate. En el alegato de apertura Rivarola dijo que en principio sostiene la calificación de privación ilegal de la libertad agravada por el uso de violencia y amenazas (subsidiariamente los delitos de coacción y amenazas con arma), tentativa de homicidio en perjuicio de Matías Leiva y Fabián Leiva, imputable como autor a Rosales y partícipe a Ulloga. Lesiones gravísimas, graves y abuso de arma, imputable a ambos como coautores. Portación ilegal de arma de uso civil, atenuado por ser legítimo tenedor y entrega de arma de uso civil a quien no es legítimo usuario, respecto de Rosales y portación ilegal de arma de uso civil en relación a Ulloga.

La defensa

Por su parte Daniel Sandoval a cargo de la defensa, negó los hechos tal como los relató la fiscalía, y anticipó que los dichos de los testigos de la Fiscalía no son ciertos, y que ni Rosales ni Ulloga fueron agresores, sino que fueron agredidos por el otro grupo.
Los primeros en declarar en el juicio fueron los imputados, dando su versión de los hechos. Luego fueron escuchadas, una a una, las víctimas. También declararon los peritos y los vecinos del lugar.

Nuevos hechos

ROBO:
Autores ignorados rompieron el vidrio de la ventana de la cocina, ingresaron y sustrajeron una motosierra grande, otra mediana, un cañón digital y un saco de cuero marrón. Sucedió el martes entre las 20 y las 22 hs. en San Martín al 1300, Esquel.

HURTO:
Una mujer dejó su vehículo estacionado en 9 de Julio y Owen Jones, y le sustrajeron una bolsa que contenía documentación, dinero, llaves y otros objetos, por la ventana trasera. Sucedió el lunes entre las 20:30 y las 22 hs.

martes, 15 de noviembre de 2011

Robos calificados


PRISIÓN PREVENTIVA PARA EL SEGUNDO IMPUTADO

El domingo 25 de septiembre por la tarde, se dispuso la prisión preventiva de uno de los imputados por los robos calificados ocurridos en dos establecimientos de Trevelin, en el mes de agosto. El cómplice de aquel imputado recién fue traído a Esquel un mes y medio después, cuando la justicia cordobesa concluyó una serie de medidas en torno a una causa por hechos similares cometidos en esa jurisdicción. A pedido de la Fiscalía el Juez dispuso la prisión preventiva hasta el juicio por peligro de fuga y entorpecimiento procesal.

El 1 de agosto de este año, a las tres de la madrugada, dos sujetos ingresaron a una cabaña ubicada en el predio de una chacra del km. 5 de la Ruta 71 en Trevelin. Para entrar emplearon una llave falsa, ganzúa o elemento similar. Los dueños de casa dormían, los intrusos los alumbraron en el rostro con linternas, los apuntaron con armas de fuego y los ataron de pies y manos para exigirles que les entreguen el dinero que poseían. Luego de revisar todo el lugar se fueron con el dinero un televisor LCD de 32’, una pistola, una mochila, un celular Nokia, una cámara de fotos digital, un binocular y prendas de vestir.El 23 de agosto a la misma hora, encapuchados y usando también ganzúa o llave falsa, entraron a un establecimiento de Trevelin sorprendiendo a tres mujeres, una de ellas de muy avanzada edad. Las amedrentaron con un arma de fuego y las alumbraron con linternas, también les exigieron dinero y les ataron las manos y pies. Una de las víctimas golpeó con las piernas a uno de los sujetos y este le respondió golpeándola con un hierro en su cabeza y provocándole lesiones. Luego revisaron todo el domicilio y se hicieron de una buena suma de dinero, un teléfono celular, una linterna, un sombrero, una notebook de 14’ y prendas de vestir.

Los peligros

El imputado fue aprehendido en Junín, provincia de Buenos Aires. Su vínculo con Trevelin se dio a través de una joven de esa localidad que conoció en Junín. Para la Fiscalía, ni el ni su consorte de causa tienen arraigo, sino que ambos han hecho de los delitos contra la propiedad una forma de vida. Este dato, sumado a las causas penales que el imputado tiene en Córdoba y en Río Negro, fueron el argumento central para el Juez Jorge Criado a la hora de convalidar el pedido fiscal de prisión preventiva. El defensor no se opuso al pedido.
Por otra parte la Dra. Fernanda Révori fundamentó la existencia del peligro de entorpecimiento procesal, por las amenazas vertidas a las víctimas y también a un testigo.
En los próximos días se realizarán ruedas de reconocimiento con las víctimas. Esta misma medida de prueba se realizó con el otro imputado, y el resultado fue positivo, resultó reconocido.

Nuevos hechos

ROBO:
Autores ignorados cortaron un candado y sustrajeron un portón metálico en el Paraje Las Golondrinas, sobre Ruta 40.

ROBO:
Personas no identificadas rompieron el cerrojo de una ventana, ingresaron a una cabaña, ingresaron y se llevaron varios elementos. Ocurrió en el Paraje Entre Ríos, a principios del mes de noviembre.

HURTO:
Un turista fue al lago Epuyén, dejó la puerta de su vehículo abierta y al regresar constató que le habían sustraído la notebook.

ROBO:
Autores ignorados rompieron un candado y sustrajeron herramientas, dos hormigoneras y una amoladora de una obra en construcción ubicada sobre Ruta 40 en El Hoyo. Sucedió entre el viernes y el sábado últimos.


HURTO:
Autores ignorados sustrajeron seis rieles de pesca, dinero de la caja registradora y dos motores eléctricos náuticos. Sucedió el lunes a la madrugada en un camping del Lago Futalaufquen.

TENENCIA DE ARMA:
Un control policial en la Ruta 40, zona de Gobernador Costa, secuestró un revolver calibre 22. Sucedió este martes a las 11hs.

HURTO:
Autores ignorados sustrajeron una bicicleta que se encontraba guardada en un quincho, sin llave. Sucedió el domingo en el Barrio UOCRA, Esquel.

HURTO:
Una vecina de Gualjaina denunció que le sustrajeron una manguera del patio. Ocurrió entre la noche del domingo y el mediodía del lunes.

HURTO:
Un vecino de Esquel denunció que le sustrajeron una bicicleta del patio. Sucedió el lunes a las 11.30 hs. en Avda. Fontana casi Alsina.

lunes, 14 de noviembre de 2011

Procedimientos del GEOP en Corcovado

INOCENTE

El tribunal colegiado absolvió al Jefe del Grupo Especial de Operaciones de la Policía, Miguel Gómez. Los Dres. Jorge Criado y Martín O’ Connor leyeron sus votos, en tanto que el Dr. Daniel Camilo Pérez, juez de Sarmiento, no pudo hacerse presente. Los magistrados consideraron que en Corcovado existieron irregularidades y abusos cometidas por miembros de la policía en marzo de 2009, pero que estos no fueron cometidos por el GEOP. También hicieron un llamado al Estado provincial para que repare los daños sufridos por las familias afectadas por los allanamientos, y a que implemente nuevas medidas tendientes a evitar que policías puedan actuar amparados en el anonimato, como sucedió en esta oportunidad.

De los dos votos que fueron leídos, solo uno observó la comisión de un hecho abusivo en cabeza de un miembro del GEOP. El GEOP al irrumpir en la casa de Garcette lo encontró a este sentado en una silla mirando televisión, al no tirarse inmediatamente al piso, O`Connor da por cierto que un uniformado le “tiró de un culatazo al suelo a Angel Ricardo Garcette y –mientras éste caía- le propinó un puntapié en la zona de la cintura, ocasionándole un hematoma de 2 por 3 centímetros.” El juez se preguntó para qué la patada si con el culatazo del arma bastaba para reducirlo. Y concluyó entendiendo que “la lesión producida por un integrante del grupo GEOP al Sr. Angel Ricardo Garcette, atravesó el sendero del injusto, lo que constituyó una mortificación moral excesiva y abusiva, puesta en términos que fueran utilizados en la acusación”. Sin embargo el mismo juez consideró que Gómez no puede responder por este hecho por diferentes motivos, en primer lugar porque no fue el autor, en segundo término porque ni siquiera habría estado presente, y en tercer lugar porque evidentemente este acto no respondía a un plan previo, sino que sería un exceso cometido por un agente en particular.

Consideraciones sobre los testimonios

Ambos magistrados hablaron de una co-construcción del relato, de condicionantes de tipo emocional y de paso del tiempo por parte de los allanados, y de afecto y compañerismo del lado de los policías.
Martín O’Connor sostuvo que: “Los allanados (casi todos miembros de la familia Bustos) han sufrido este hecho hace dos años y –muy probablemente- lo hayan comentado muchas veces entre ellos. Es probable que las cosas recordadas se vean mezcladas por apreciaciones escuchadas, por solidaridad con el grupo de pertenencia, por un ataque que sintieron como aditamento de desgracias como la muerte de un integrante de la familia y otro gravemente herido.-
Por su parte, el “bloque de los policías”, también por un sentimiento de pertenencia a la institución, por solidaridad con un compañero y por defensa propia para un caso futuro que les pueda tocar en forma individual, han tendido a disminuir la magnitud de los hechos y a olvidar circunstancias incriminantes del procedimiento en general.-
Debo decir, a estas alturas, que ambos grupos tienen una cuota de razón.-
Considero que la situación que se vivió en Corcovado tuvo muchas aristas de irregularidades y abusos, pero no por parte del Grupo GEOP.-
Este Grupo entraba con extrema rapidez a los domicilios, reducía a los moradores del lugar con razonable utilización de la fuerza y –teniendo controlado el lugar- y a la orden de “Despejado” se retiraba del sitio.-
Estimo con alta probabilidad (casi con certeza) que la gran mayoría de los encuentros con encapuchados fuera de los domicilios y fuera del contexto que acabo de relatar, no haya sido con integrantes del GEOP sino con efectivos de Brigadas de Investigaciones o de Drogas, quienes también se conducían encapuchados y por eso confundidos con el grupo de elite.”

Más allá del hecho juzgado

El Juez Jorge Criado, luego de dar a conocer los motivos por los que decidió absolver al imputado, realizó una serie de consideraciones referidas a lo ocurrido en Corcovado. “He presenciado, durante las largas jornadas en que se desarrollara el presente debate, la enunciación -y en algunos casos confirmación- de actos irregulares, los que, por no ser responsabilidad del único imputado traído en esta causa, ninguna sanción tendrán.
También he presenciado un sinnúmero de equívocos, y permítase la palabra que con prudencia escogiera.
Atónito contemple, en los registros de video exhibidos, a efectivos policiales encapuchados, sin uniformes o distintivos identificatorios, armados al estilo de la guerrilla y haciendo alarde de un despliegue intolerable de actuación en un marco de impunidad. Lo que no vi en los videos lo leí en los ojos de algunos testigos que desnudaron su miedo creíble y en las palabras de idóneos profesionales de diversos organismos judiciales que tuvieron la amarga tarea de abordar el después de una tragedia.
Que un niño tema al uniforme de una fuerza de seguridad es una deformación insoportable del sentido moral de una sociedad y un cachetazo en el alma de cientos de funcionarios públicos que día a día ponen en riesgo sus vidas en su propósito funcional.
Que una persona tema ser portador de un apellido determinado, nos aleja de nuestra naturaleza humana y niega absolutamente nuestra voluntad de vivir en una sociedad de iguales, organizada en la forma una república democrática.”

Resguardo de identidad vs. Impunidad

Otro de los aspectos que se planteó en la sentencia es el relativo a las implicancias del uso de capuchas y demás elementos que cubren el rostro de los policías en diferentes procedimientos. O’Connor sostuvo que “Una cosa es la ropa ignífuga que utiliza el Grupo de Operaciones Especiales de Policía y otra –muy distinta- es la capucha como prenda para cubrir el rostro.-
En general toda capucha me remite a épocas oscuras de nuestro país, más la citada en segundo lugar no puede continuar naturalizada.-
No escapa a mi persona las justificaciones y explicaciones brindadas por el Comisario Guzmán, Jefe de la División Drogas de Esquel.-
Refirió el comisionado que el personal de Drogas no puede andar al descubierto, pues es gente que debe hacer averiguaciones, muchas veces ocultando su condición de policía.-
Si bien la opinión es razonable, lo cierto es que un rostro cubierto es sinónimo de impunidad y la impunidad es hermana del exceso.-
Sin ser especialista en seguridad, ni pretender serlo, entiendo que debería el encapuchado tener un número o un nombre clave en la capucha o en algún lugar visible de su vestimenta, número que sólo será conocido por su Jefe, o un Superior o el Fiscal. De esta manera se resguardaría la identidad (en el sentido reclamado por Guzmán) pero el efectivo sería pasible de ser identificado en caso de cometerse algún exceso.-
En el caso del GEOP el caso es aún más fácil de resolver, pues su objetivo no persigue el anonimato, sino una protección del cuerpo de los efectivos. En caso de la Unidad Especial, los chalecos utilizados deberían llevar el nombre de quien lo porta.-
Además, considero que estos grupos especiales deberían portar cámaras, las que deberían ser entregadas a la Superioridad (sin editar) al terminar cada procedimiento.”

Los daños

Los jueces entendieron que la provincia está en deuda con los ciudadanos de Corcovado. “Si bien el rompimiento de las puertas es un procedimiento permitido, eso no implica que no haya sido cometido por Funcionarios de la Provincia. Esos daños, en muchos casos, no han sido abonados a las personas allanadas. Otros daños que también fueron consecuencia directa de los procedimientos, aunque no hayan sido delitos, deben ser paliados”.
El Dr. Pérez adhirió al voto de O’ Connor, señalando que “si bien es cierto principie en mi voto con el acompañamiento a que esta fuerza especial ( Geop) debía ser la que efectivamente lleve adelante estos procedimientos, por la espacial situación que se estaba viviendo en Corcovado, luego también advertí que resulta injusto que los ciudadanos particulares deban sufrir en su propiedad la rotura de sus puertas o algún otro bien como consecuencia del protocolo que sigue este grupo especial. Se puede admitir que este procedimiento de irrupción sorpresiva sea el que corresponde por la alta peligrosidad que tiene ese momento del procedimiento y que sea necesaria romper en vez de golpear una puerta esperando que le abran, pero debería inmediatamente indemnizarse a cada propietario con los daños producidos. Así hemos visto en Corcovado la cantidad de puertas dañadas que aun están rotas, en el mismo estado o algunas ya ha sido sustituidas pero con el esfuerzo económico de sus propietarios. Esta situación no debiera volver a ocurrir”.

El fallo

Luego de 146 páginas de minucioso análisis de todas las probanzas, los magistrados fallaron absolviendo a Miguel Gómez por todos los delitos que se le imputaron. Fueron rechazados los planteos de la defensa sobre la nulidad de la acusación ampliada por la Fiscalía en juicio y rechazado su pedido de remitir actuaciones a la Fiscalía para que se investiguen los delitos de falsa denuncia y falsedad ideológica.
Finalmente los jueces realizaron una recomendación al Estado Provincial: “RECOMENDAR al Estado Provincial, por los medios y acciones que se estime correspondan, la pronta intervención en la localidad de Corcovado relevando los daños materiales y morales sufridos por las víctimas de los hechos juzgados y, en su caso, reparando los mismos conforme proceda.

Nuevos hechos

ROBO:
Autores ignorados violentaron la puerta de ingreso a una vivienda y sustrajeron dinero en efectivo, en moneda nacional y extrajera, además de una motosierra. Sucedió el jueves por la tarde en Humphreys, Esquel.

ROBO:
Autores ignorados rompieron la puerta de acceso a un Centro médico, ingresaron y sustrajeron dinero en efectivo. También violentaron la caja fuerte pero esta se encontraba vacía. Sucedió en Rivadavia al 1300, Esquel.

DAÑO:
Un vecino de Cholila denunció que le cortaron varios metros de alambrado en su propiedad.
Sucedió entre el 27 y el 28 de octubre.

TENTATIVA DE ROBO:
Un sujeto rompió el vidrio de una ventana, ingresó a una ferretería, preparó objetos para llevarse y fue aprehendido antes de darse a la fuga. Estaba en estado de ebriedad. Sucedió el sábado a las 7 hs. en Gobernador Costa.

TENTATIVA DE ROBO:
Un vecino de Esquel dejó su vehículo estacionado en O`Higgins y 25 de Mayo, le rompieron un vidrio, sustrajeron una cartera y la dejaron tirada a pocos metros. Sucedió el viernes a la tarde en Esquel.

HURTO:
Un vecino de Gualjaina denunció que le sustrajeron un recado completo. Sucedió el sábado.

TENTATIVA DE HURTO:
Un hombre entró a un supermercado, metió una botella de Fernet en su mochila, lo vieron, esperaron a que salga para ver si la pagaba, y como no lo hizo, antes de que saliera del lugar, lo pararon, le pidieron que abra la mochila y lo entregaron a la policía. Sucedió el domingo por la tarde.

ROBO:
Autores ignorados sustrajeron una batería de un tractor y otros elementos. Sucedió entre el viernes y el sábado últimos en una chacra de Trevelin.

ROBO:
Personas no identificadas rompieron el cristal trasero de un vehículo y sustrajeron una filmadora digital Panasonic. Sucedió el domingo al mediodía en Almafuerte al 1400, Esquel.

DAÑO:
Un vecino de Belgrano al 1000, Esquel, denunció que el domingo a la tarde le rompieron un vidrio de la parte alta de su vivienda.

ROBO EN POBLADO Y EN BANDA:
Un joven caminaba por el Barrio Baden con su novia cuando fue interceptado por un sujeto que lo golpeó, y luego aparecieron otros que lo golpearon y le sustrajeron la campera y una gorra. Sucedió el domingo a las 18:30 hs. en Esquel.

HURTO:
Autores ignorados ingresaron a una vivienda por la ventana que estaba abierta y sustrajeron una notebook, una netbook, un DVD y joyas. Sucedió el domingo por la tarde en Alvear al 2500, Esquel.

viernes, 11 de noviembre de 2011

Procedimientos del GEOP en Corcovado

LA ÚLTIMA PALABRA

Miguel Gómez fue le último en hablar, luego de escuchar los alegatos de las partes. En esta oportunidad ofrecemos su declaración completa.
La Oficina Judicial modificó el horario previsto para la lectura de sentencia, lo resuelto por los jueces se conocerá el lunes próximo a las 7:30 hs. en la Sala 1.

El sábado pasado, una vez finalizado el alegato de su defensor, Gómez quiso ejercer su derecho a la última palabra, y dijo: AUDIO

Yo no vine a Corcovado por iniciativa propia, vine porque fui convocado, y lo entendí, ampliamente, por razones lícitas. Se me ordenaron una serie de allanamientos que de primera mano entendí que tenían cierta particularidad. Acostumbrado por los años que llevo en el grupo nunca me he dejado llevar por impulsos, nunca me he comprometido sentimentalmente con lo que voy a tener enfrente. Quiero decir con esto que la muerte de Roberts a mi me significaba lo mismo que la muerte de cualquier otro ciudadano, no venía a tomar revancha. Si bien no se filmó ese procedimiento como bien lo explicó el Sr. Fiscal, fue por una cuestión de cómo se fueron dando dinámicamente las cosas. No traje la cámara, es verdad.
El día 12 cuando se me dan los 14 allanamientos, a simple vista me di cuenta por la poca información que tenía en ese momento, no podíamos recorrer el pueblo porque estaba sensible en cuanto a la posibilidad que tuviera información de que íbamos a allanar. A simple vista me di cuenta de que estábamos en el marco geográfico de tres cuadras aproximadamente. Y eso fue lo que yo procuré, y le pedí a mi defensor ilustrar a los señores integrantes del tribunal cuando pedimos la posibilidad de hacer una inspección ocular allá. Lo que yo procuraba demostrar era lo cercano que era todo eso. Y también que era shockeante en esta localidad en esta localidad chiquita, una localidad ni siquiera acostumbrada a ver caravanas de vehículos, con mas razón del GEOP. Es cierto que no fuimos a otros domicilios en esa inspección ocular. No fuimos porque uno quedaba a 20 km., el otro, la chacra está a 6 km aproximadamente…
Le decía que a simple vista vi que era un sector acotado de tres cuadras, que eso generaba ya una sensación inicial en los pobladores. De la mano de esto y al ver tanto personal policial, y producto de experiencias lamentables que me pasaron en Puerto Madryn, yo le dije a Marinao ‘yo veo mucha gente con escopetas y con cartucho AT, marquemos la diferencia, ellos con AT, nosotros no llevamos AT, pero que sepan que con AT pueden matar’, y a eso se remitió Marinao. AT al perímetro, PG (propósitos generales) nosotros. Si se rompió el vidrio de ese Renault 12, no se, yo no lo vi doctor. Yo no soy ‘el hombre de al lado’, desconozco algunos aspectos del derecho, discúlpeme. En la práctica yo soy el hombre de atrás, mejor dicho, llevado a Corcovado, soy el hombre del medio. Por qué: escalón de asalto, atrás yo, y no en cercanía de dos tres metros, mucho mas atrás, metros mas, ocho diez metros más, las autoridades que me acompañaban. Presuponen que porque alguno aparece haciendo señas soy yo, pero todos hacemos señas en el GEOP, o porque tal vez alguno aparece medio morocho, y en realidad la gran mayoría somos morochos, esa es la verdad.

No traje la cámara para filmar en Garcette, se filmó el día 12 y parte del día 13 con la cámara y camarógrafo que amablemente nos facilitó el oficial Guzmán de Drogas Peligrosas. En lo de Salinas no existió la cámara. Por qué. Yo vine de la montaña, yo como Jefe del GEOP, llegué el día 8, allané el día 12, me fui al Rincón del Aceite el día 12 a la tardecita. Volví raudamente a Corcovado al campo de Ruperto Bustos el día 13 al mediodía, y me fui a la montaña nuevamente al día 13 a la noche. Y no vuelvo hasta día 27 de marzo, ya con una fracción menor. Yo vuelvo a Corcovado pero no de Rawson, vuelvo de la montaña. El resto de la fracción del GEOP se fue el día sábado, el 14 de marzo. Éramos 14 hombres, yo me quedé, cinco quedamos internados en el monte. Porque el día 13 al Mai lo ven en la montaña. Lo ve Marinao con su gente, yo subo, paso el río, paso el cajón, ya no lo encontramos. Pero ahí me quedé. Yo viví en el monte desde el día 13 a la noche hasta el 27 a las 3 o 4 de la tarde.

No pretendo agobiar con todos los detalles que han pasado, no quiero ser redundanante, pero sí he notado, y lo quiero decir aunque suene feo, mentiras. Ya cuando todo este proceso se inició, noté que se mintió y se jugó mucho con la sensación de la gente. El hecho mas puntual, cuando trajeron a la señora anciana, refirió fal, si hoy le preguntáramos por fal no sé si sabe lo que es. Refirió que la tiraron al piso y le pisaron el cuello, cosas que no prosperaron en esta instancia, pero claramente quedaron ese hecho y otros, demostrados con los videos que yo presenté al señor fiscal.
En la misma circunstancia aparecen los láser, la señora Rosa A. Bustos, dijo ahí donde está el señor, la presencia de los láser. Los videos después lo muestran claramente que el láser no existe, no está, no es de conveniencia táctica un láser, no sé por qué todos ven un láser. Yo no los tengo, y no los tendría el GEOP.
Voy a resumir en un ejemplo lo que a mi me pasó. En un ejemplo bomberil para que todos entiendan. Soy integrante de un cuartel de bomberos, me mandaron a apagar un incendio, me dijeron en tal casa, tal casa, tal casa hay humo, metete. Me metí con manguera y equipo y estaban haciendo un asado.
Ese es me parece el ejemplo más gráfico de lo que yo he vivido.

Entiendo bien la posición del Fiscal, es su trabajo, y le agradezco que me considere un compañero de trabajo, tiene que llevar hasta la última instancia la investigación, de más está aclararlo. Más allá de lo estresante que es esto, en mi vida profesional he vivido cosas estresantes, pero no como esta. Me resta agradecer el trato que me han dado, y requerir que el Tribunal entienda que en el marco que se dio todo esto, en el marco de las circunstancias que se dieron desde aquel hecho inicial es que yo calibré o modulé, la intervención del GEOP. Quedan en el tintero un montón de aspectos, el tema de los perímetros, me parece que no viene al caso cuál es la esencia de los perímetros. Pero en dos renglones voy a decir cual es la esencia de los perímetros. No era someter a Corcovado, era por si la situación evolucionaba en un sentido de mayor gravedad. No es ejemplo de nada lo que a mi me ha tocado vivir. Yo estuve en Ramallo como integrante pasivo de un curso de negociación de rehenes. Y si algo aprendí ahí, es la importancia de los perímetros por si la situación se complica.

Entendí y en Corcovado fuimos flexibles, porque tal vez en otras circunstancias no hay que serlo, con el tema de las mujeres, con el tema de los niños, ampliamente somos flexibles. Y es por ello que se mezclan algunas cosas, no quedan claras y me perjudican me parece. Y son el sobreender que trabajábamos mal por el hecho de permitir que egrese o ingrese alguien. En todos los casos que eso pasó, si ingresó o no ingresó, ya había otro personal, que seguramente por sentido común permitió que Héctor Bustos ingrese o que la señora Nilda Almendra saliera. Porque como bien quedó claro en este juicio, lo máximo que podemos estar son dos minutos, minuto cuarenta y cinco. Había mas encapuchados, sin duda alguna, revisaban más encapuchados. Solamente hay que fijarse en los videos que hemos presentado y algunos de ellos filmados por quien acompañaba al Dr. Falco. Es más al vehículo de Laora los detienen los encapuchados en un Renault 19. El Grupo va a prestar apoyo y nada más, porque íbamos a otro allanamiento y nos encontramos con esa situación. Pero está la otra lectura. Los denunciantes dicen, encapuchado = GEOP. Y en eso voy a marcar una pequeña referencia que he notado a lo largo del debate. En le principio, los testigos denunciantes referían ‘capucha- capucha – capucha – uniforme negro’. Pero ya después en el segundo día y a última hora eso se mejoró con la presencia de un casco. Y sin duda para alguien que vio algo tan traumático como que le invadan su propiedad privada con un allanamiento, si la primera vista que tiene es un hombre con casco encapuchado y después pueden pasar dos horas, y más aun si sigue un encapuchado adentro, va a seguir siendo el mismo que entró, no lo va a notar.
Entiendo, y el tribunal mejor que yo, y los conocedores del derecho, que ustedes señores jueces están juzgando mi conducta en circunstancias determinadas, que yo en este momento… que nadie puede repetirla idénticamente. Lo que se vivió allá se vivió en ese momento y ninguna circunstancia del futuro podrá ser igual. Lo que en aquel escenario se dio, o dicho de otro modo, lo que en un escenario puede darse extralimitado, imprudente, negligente, excesivo, puede no serlo tal vez en otro escenario. Yo se que ustedes con sentido común lo sabrán valorar.
Nunca me había tocado estar en un proceso, pero si logré sostenerme es producto de saber que yo no fui integrante, ni planifiqué, ni hubiera consentido planificar lo que se me endilga. Me sostuve también producto de saber que hay un Dios arriba que sabe que yo nada de eso hice. Si de algo fui parte es de un plan para hacer bien las cosas, de un plan que se conformó a nivel institucional, de lograr reducir sin riesgo de vida al Mai Bustos.

Nuevos hechos

ROBO:
Una mujer dejó estacionado su vehículo fuera de la escuela ex Normal, el jueves a la tarde, y le rompieron un vidrio para sustraerle la campera. Ocurrió en Esquel.

HURTO:
Autores ignorados sustrajeron una bicicleta de la caja de una camioneta en 25 de Mayo casi Ameghino, Esquel, el jueves a las 21:20 hs.


HURTO:
Autores ignorados sustrajeron latas de pintura, herramientas, una carretilla y una caja de clavos, de un obrador en Cushamen.

HURTO:
Un mecánico denunció que le sustrajeron la tapa del tanque de nafta de la camioneta de un cliente, además de la llave de contacto y otros elementos. Sucedió entre el miércoles y el jueves últimos.


ROBO:
Autores ignorados rompieron la puerta del nicho de gas y sustrajeron un medidor y un regulador. Sucedió el martes a la madrugada en el Barrio Ceferino, Esquel.

ROBO:
Un vecino de Cholila denunció que le sustrajeron doce postes de su parcela. Ocurrió el martes por la tarde.

jueves, 10 de noviembre de 2011

Explotación de bosque nativo


MEDIDA DE NO INNOVAR INTERRUMPE PLAN DE MANEJO DE BOSQUE EN CHOLILA

La medida original fue dispuesta el 3 de noviembre a pedido de la Fiscalía. Este jueves se realizó una audiencia solicitada por el abogado defensor del empresario que llevaba adelante el plan de explotación forestal, para plantear la revisión de la medida, solicitar permiso para continuar con el desarrollo del plan y requerir la restitución del expediente secuestrado a la Dirección de Bosques. Con la oposición de la Fiscalía, el Juez rechazó la solicitud por considerar que hay elementos suficientes para mantener vigentes las medidas, ante la posible comisión de uno o varios hechos que constituyen delito.

La investigación fiscal


Martín Zacchino es el fiscal que tiene a su cargo la investigación originada en una denuncia vinculada al manejo de un bosque de lenga en la localidad de Cholila, a través de una empresa forestal de Esquel. Aparentemente para llevar adelante esta explotación, se habrían construido caminos en un predio sobre el cual el IAC reconoció derechos de una ciudadana de esa localidad. En diálogo con la prensa, Zacchino señaló que para poder llevar a cabo esto, se habría “usurpado esa ocupación, y en este contexto se detectaron algunas irregularidades en el trámite administrativo de la Dirección de Bosques para aprobar este plan de manejo. Irregularidades que llevarían a un daño ambiental, no porque el plan de manejo en sí mismo sea un daño ambiental, sino porque no se dieron las condiciones ambientales necesarias para discutir, controlar o fiscalizar, que este manejo del bosque esté haciéndose de un modo regular o con los controles que debe tener”.
El fiscal indicó que “es un lugar donde habita el huemul, donde hay especies arbóreas de más de 300 años y está produciéndose un volteo de entre 200 y 300 especies por día.” Además agregó que, más allá de la cuestión administrativa que es resorte exclusivo de la Dirección de Bosques y Parques de la Provincia, la Fiscalía está investigando si hay irregularidades en el trámite y si esto a su vez constituye o no una situación de daño ambiental.
La denunciante tiene un permiso precario de ocupación, por lo que para la Fiscalía el damnificado directo no solo es ella sino que, por aplicación de la Constitución de la Provincia, los bosques son provinciales, por lo que es damnificado el Estado Provincial.

Planteo y respuesta

El abogado Horacio Hernández planteó que la denunciante no está legitimada para solicitar el cese de la actividad en el plan de manejo aprobado por Bosques, que no existe peligro en la demora, y que la resolución no estableció una caución para asumir las costas que resulten de la medida en caso que esta fuera revocada.
Por su parte Zacchino se opuso al pedido de la defensa, considerando que Hernández no aportó ningún elemento de prueba tendiente a revertir los argumentos en los que se basó la medida dictada por el juez a pedido de la Fiscalía. También sostuvo que en este caso se encuentra legitimado para actuar el Ministerio Público Fiscal porque es su deber hacer cesar los efectos de un delito cuando este es detectado. En este caso concreto se investiga una presunta usurpación, un posible daño ambiental, y también si existe o no alguna responsabilidad de un funcionario público. Zacchino señaló que, siendo que es el Estado el que pide la medida, también es el garante, con lo que no es necesaria la existencia de una caución por parte de la denunciante.

Resolución

El juez José Colabelli compartió con la Fiscalía que la legitimación para actuar, en este caso, es del Ministerio Público Fiscal. También señaló el magistrado que en la autorización del plan de manejo realizada por la Dirección de Bosques, no se define claramente cuáles son los límites en el terreno para saber dónde está la masa boscosa que le corresponde. “Cuando se le adjudica el plan de manejo dice aproximadamente 98 hectáreas en parte del lote 14, sin definir real y concretamente la Dirección de Bosques cuál es esa superficie”, señaló.
Paralelamente la Fiscalía está realizando pesquisas para determinar si los trabajos denunciados han sido realizados dentro de la superficie que ocupa la denunciante, y por lo tanto si esta puede ser tenida por víctima en esta causa.
Por otra parte, teniendo en cuenta los planteos del defensor y de la fiscalía, el juez autorizó a la Dirección de Bosques a realizar los trabajos necesarios para retirar los desechos de la tala realizada, para prevenir riesgo de incendio.
En cuanto a la solicitud de restitución del expediente, el Juez rechazó también el planteo del defensor.
Luego de escuchar la resolución, Hernández solicitó que se fije audiencia de revisión.

Nuevos hechos

HURTO:
Autores ignorados sustrajeron una bicicleta del patio de una escuela en Trevelin. Sucedió el miércoles por la tarde.

HURTO:
Una mujer relató que sacaba el auto cuando pasó un chico y le sacó la cartera conteniendo la billetera y tarjetas, además de un celular. Sucedió el miércoles a las 9:30 hs. en San Martín al 1300, Esquel.

HURTO:
Un vecino de Esquel dejó la camioneta en el predio de su casa durante la noche y a la mañana constató que le habían sustraído una mochila con herramientas. Ocurrió en Rivadavia al 1300, entre el martes y el miércoles.

miércoles, 9 de noviembre de 2011

Procedimientos del GEOP en Corcovado

FRAGMENTOS DEL JUICIO. MÁS TESTIMONIOS

Cantidad de testigos ofrecieron su conocimiento de lo sucedido en marzo de 2009 en Corcovado. El lunes presentamos el testimonio de Leandro Rojas, uno de los denunciantes. En este caso traemos fragmentos textuales de seis testimonios más, tanto de testigos presentados por la Fiscalía como por la Defensa. Puntos de vista diferentes sobre los sucesos que se juzgan y por estos días son analizados por los jueces del tribunal.


MALVINA SOLEDAD ROJAS

Yo fui a lo de mi mamá, Raquel Bustos, y ya estaba todo revuelto. Me contó que había pasado en lo de mi abuela (Concepción Jaramillo) y me contó que le habían pegado a una de mis tías (Rosa Bustos), porque es todo ahí en el barrio.
Yo estuve conversando con mi mamá un momento y mi mamá estaba super asustada porque a la nena la habían sacado desnuda de la cama y le habían pasado un montón de cosas, así que yo que estaba así asustada, le dije que yo le iba a avisar a mi otro hermano, que vive en la entrada del pueblo, lo que estaba pasando y que seguramente iban a ir a su casa. El estaba solo en su casa con el bebé que tenía dos años. Entonces yo le dije a mi mamá que iba a ir a verlo y a avisarle que abra la puerta porque en mi casa habían partido dos puertas. El estaba operado porque había pasado algo en nuestra familia antes. En enero a mi me mataron a mi hermano. Yo quería avisarle porque él estaba operado y si le pegaban… el tuvo una operación grandísima y casi se muerte en ese hecho.
En el camino me pasé a un cyber que hay, un quiosquito que tenía cabina y llamé acá a Esquel, a los Tribunales de Esquel. Hablé con una secretaria que no me recuerdo el nombre, y pedí hablar con el fiscal Falco que en ese momento yo conocía su nombre por el caso de mi hermano que había ocurrido en enero. Así que pedí hablar con él para contarle lo que estaba pasando, que no era normal que estén golpeando y rompiendo todo, para mí no era normal un allanamiento así, entonces yo quería avisar. Entonces me fui hasta el quiosco y le dije a la señora lo que estaba pasando y me dijo: “tranquilízate, no te puede atender en este momento porque está en Corcovado con los allanamientos, y los allanamientos sí están autorizados pero no de esa manera”. Yo le dije que hagan algo porque acá están pasando cosas graves y no puede ser lo que está pasando.

Malvina relató que luego se fue para la casa de su hermano y este estaba afuera con el nene y el gasista trabajando adentro. También reprodujo el diálogo que mantuvieron en ese momento, cuando ella lo alertó diciéndole que deje la puerta abierta y le contó lo que había pasado en la casa de su madre.

Cuando yo enfrento para arriba llegan los policías encapuchados y me bajaron para abajo a empujones, y a mi hermano le dieron una patada y lo tiraron al piso y ahí lo empezaron a patear en el piso. Yo ahí les grité que paren, que no lo golpeen, que estaba mal lo que estaban haciendo que yo había llamado y sabía que no estaban autorizado de esa manera. Entonces siguieron pateándolo, a mi me pusieron contra la pared y me sujetaban con una mano la cabeza. Tenía un arma el hombre que me sujetaba y el nene corrió hacia la quinta.”

Malvina relató como el nene se dirigió corriendo hacia el arroyo y uno de los policías salió tras él y lo trajo. Que el nene lloraba y ella pedía que la dejen agarrarlo. Luego del ingreso al lugar por parte del testigo de actuación y del policía que llevaba las órdenes de allanamiento, le dieron el bebé para que ella pueda atenderlo.


DANTE TELMO BUSTOS

Yo me encontraba ese día que me fueron a hacer el allanamiento, la mañana era, no estoy muy seguro, entre ocho y media, y nueve. Me acuerdo más o menos del horario porque estaba alistando a mi nena de cinco años para llevarla al jardín. La había levantado, le había hecho la leche ya. Y en eso llega mi mamá, me dice: ‘Dante que vas a hacer, vas a llevar la nena vos o la llevo yo’. Entonces le digo: ‘no, la llevo yo’. En ese momento me dice ‘¿qué habrá pasado que hay tanto revuelo de gente’. Y yo me acerco a mirar a la ventana, cuando en eso veo gente que venía corriendo así encapuchada, con armas. Que venían a mi casa. Cuando me doy vuelta vuela la puerta de mi casa y le pasa a mi nena por encima la puerta. Y ya, me redujeron a mi, me tiraron al piso, me empezaron a patear, me esposaron. A mi nena la apuntaban con un arma larga, no me dejaban que la agarre, nada. Yo decía
- ‘¿Qué pasa?
- Nada, nada. ¿Dónde está ese h.d.p? ¿dónde lo tenés entregalo? ¿dónde está ese h.d.p.? lo vamos a matar. Tu primo.
- No, acá no hay nadie vos fijate.
Ellos revolvían y tiraban las cosas-
- y vos no te hagas el vivo. También te vamos a matar
Y le decía que me dejen, quería agarrar a mi nena. Y mi nena le decía que no me peguen, que no me pateen. Me tenían tirado contra el coso y no me dejaban dar vuelta, que mire, nada. Entonces ahí pidió mi vieja que por favor la dejen salir para ir a la otra casa porque estaba la nena de ella sola. Hasta que le dijeron que salga y ahí se llevaron a mi nena. Y a mi me seguían pegando. Después de eso, me pegaron todo y ahí gritaron despejado, y ahí entraron, me acuerdo un hombre con una boina roja que no se que era el hombre ese, pero entró el hombre ese, entró el testigo. Ahí entró el testigo pero ya me habían pateado. Y ahí entró un flaco alto, no se que era, que dice:
- Y a este que le pasó, ¿está nervioso?
Por mi preguntaban, porque me tenían así esposado y tirado contra el coso.
- No – dice – pero estos son peligrosos.
Ahí me venían preguntando y revolvían, y revolvían, y después yo pregunté por la orden de allanamiento.
- No – me dicen –¿ la querés hacer mas difícil vos, la querés hacer más difícil?
Y ahí me hicieron firmar después, no supe qué firmé. Me decían que firme no más, que no pregunte mucho, que si la quería hacer más difícil. Siempre me estaban apuntando con armas, iba uno me pateaba, iba otro me pisaba.

ROSALÍA HORTENCIA TORRES

Me acuerdo que mi marido entraba más o menos a las 10 de la mañana a trabajar. Yo me quedé acostada. Tengo la ventana al lado de mi cama. Había un auto gris y vi la cara de un hombre apuntando con un arma hacia esa ventana. Me levanté. Tomamos mate. Después miré para afuera y vi un policía que recuerdo que lo vi también, en la casa de al lado, así que no pasaba nada.
Después a las 10 se fue mi marido, a las 10:15 más o menos entran los comandos del grupo. Tenía las puertas abiertas, siempre nos manejamos con las puertas abiertas, sin llave. De repente entraron, siento un golpe, por las dos puertas. Veo la forma de vestir. Me gritaron ‘tirate al piso’ ‘abajo’, algo así me gritaron. Yo cuando me tiro al piso, ahí empecé a llorar y vi la forma en que entraron, que me rompen todo, las dos puertas, fue golpes, romper todo. Bueno, me hicieron tirar abajo y yo le gritaba ‘no me rompan nada, no me rompan’. Ya estaban todos adentro de mi casa, empecé a llorar y pasó uno y me pegó, no sé con qué me pegó, no sé si con la mano o con qué. Yo estaba tirada, levanté un poco la cabeza, pasó y me pegó. Y seguían entrando de afuera. En un momento me paro, cuando salieron, yo nunca había estado en un allanamiento ni nada, es la primera vez que me pasa eso. Y me levanté asustada, miré para afuera y había gente afuera también. Que miraba. Me levanté y otra vez abajo, me hicieron tirar de nuevo. Y antes que me levante pasó otro mas y me pegó en la cabeza, no sé si fue el mismo. Ahí empecé a llorar mas, el miedo, no sabía que me iba a pasar, si estaba sola, sola, sola estaba.
Después como que me tranquilicé, pero cuando me pegaron, y la forma en que entraron así, yo dije… estaba en las manos de ellos.
Después que me pegaron, todo, entró el testigo.
Ese día me agarró una crisis. Porque yo después cuando me tranquilicé me quedé sentada y me empezaron a charlar. Ahí llegó después él (marido) habrá pasado veinte minutos, media hora.
Incluso después, estaba en pleno allanamiento y me llamaron de la escuela. Suena el teléfono de mi casa, el fijo. Atiendo, pido permiso a ellos, estaban los policías que ya estaban secuestrando los celulares, teníamos que entregarles todo, y habían pedido fotos, fotos, fotos. Fotos del supuestamente asesino. Empezamos con el testigo a mirar fotos. De ahí empezó a sonar el teléfono de mi casa. Eso también me preocupó, mis nervios por lo que pasé. Llama una maestra, me llama y dice ‘podés venir a retirar al nene’, a mi hijo. Yo estaba sola y le dije que no podía porque estaba siendo allanada. Ya eso, otra cosa que me empezó a afectar, porque pensé ¿qué pasó? Y era que estaban todos en la escuela, se armó un quilombo.


Rosalía explicó que le permitieron llamar a su madre para que ella fuera en busca del nene a la escuela.
Más adelante en su relato la testigo mencionó que también le dañaron varias cosas en su quincho, y que las puertas están pegadas, quedaron así. “Esas también tuvimos un drama con mi nene. A la noche ponía para dormir los sillones, en las puertas, esa era su seguridad. Cuando escuchábamos los tiros…” En este punto de su relato, la testigo se quebró y luego siguió relatando que durante una semana se escuchaban tiros a la noche y su hijo, atemorizado, llevaba el colchón a la habitación del matrimonio. “Y yo decía, si ellos nos tienen que cuidar a nosotros ¿quién nos cuida a nosotros?”

JAVIER EVARISTO GUZMÁN


Jefe de la División de Drogas de Esquel.
“Cuando ocurre el hecho trágico de la muerte del policía en el procedimiento que realizó la Brigada, yo estaba a cargo de la División acá en Esquel, cuando se traslada personal nuestro que es de la división de policía judicial, en ese tiempo a cargo de un Oficial Jefe de apellido Gutiérrez y el Comisario Inspector Blanco. Designan al Crio. Blanco a Corcovado para investigar el hecho, él era uno de mis jefes directos así que me menciona que me prepare, que prepare la gente, que elija el personal, que seguramente iba a tener que viajar a Corcovado para colaborar en unas tareas que en el lugar seguramente me iban a indicar. Así que, tenía unos diez empleados y debo haber dispuesto creo que de los diez, y esperé que me citaran, que me llamaran. En una oportunidad, en la noche, me dicen ‘mañana a primera hora viajás para Corcovado, traé la gente’. Creo que en ese tiempo teníamos uno o dos móviles, nosotros siempre teníamos problemas con los vehículos, así que no sé si teníamos un vehículo, no me acuerdo si el otro lo pedimos a la Brigada. El caso es que llegamos en dos vehículos a Corcovado, ahí nos pusimos a las órdenes del Comisario Blanco, que es mi jefe directo. Ahí tomo conocimiento que se iban a hacer una serie de allanamientos a ver si se podía lograr la aprehensión del en ese momento fugado de apellido Bustos. Se me indica que tenía que contactarme con los Comisarios Gómez y Marinao… dispuse de uno de mis oficiales, el Oficial Ortigoza para colaborar con los allanamientos y estuve a disposición de las órdenes de ellos en los allanamientos que iban a hacer y actué con parte de mi grupo porque algunos de mis empleados se los llevaron a otro sector. A dar apoyo… algo de prevención… principalmente de perímetro para evitar que si había algún intercambio de disparos, algún enfrentamiento, que salga algún inocente herido. Así que yo me encargaba de la parte externa, generalmente de la calle, de evitar que entrara y saliera gente del lugar en que se hacían los allanamientos. No era el único que estaba, había mucho más personal que era de las comisarías del interior y también de Esquel.
Me acuerdo específicamente de uno de los allanamientos donde había una señora muy mayor de edad. Recuerdo que la casa quedaba no casi al frente de la calle sino un poquito más dentro del predio. Y observo el allanamiento porque voy detrás del grupo especial, y observo cuando había una señora muy mayor de edad que estaba en la puerta de la casa y antes de ingresar alguien la invita a sentarse a la señora y continúa el procedimiento. Ese es uno de los que más recuerdo en este momento.
Después recuerdo uno de los allanamientos de los que hemos participado, ya de los últimos de fines de marzo, el de la casa de Salinas. Pero ese recuerdo porque la información surge de la división nuestra, de que en esa casa había armas. En una vivienda particular, camino al aserradero, en la parte oeste de Corcovado. El testigo que nos da detalles exactos de la vivienda donde estaban las armas es una persona de Corcovado que nunca di el nombre y no lo voy a dar por cuestiones de seguridad. Dice que habían armas, que había un altillo, que en el altillo podían estar las armas y que las armas podían haber sido las utilizadas en el hecho que ocurrió cuando muere el suboficial Tito Roberts”.

Guzmán contó que cuando surgió el allanamiento por orden del Comisario Blanco debió regresar con su gente a Corcovado para colaborar haciendo perímetro mientras se concretaba.
Consultado por la Defensa, el testigo sostuvo que no supo que hubiera habido ninguna persona lesionada en el allanamiento. Más adelante en su declaración el Fiscal le preguntó si en su intervención en Corcovado utilizaron algún uniforme, y si tenían el rostro cubierto o descubierto. Guzmán sostuvo que trabajan de civil y que en esa oportunidad actuaron con la cara cubierta porque Corcovado también es parte de su jurisdicción.

La mayoría o con gorros de lana o con capucha. Por una cuestión de que si nosotros tenemos que investigar a alguien nuestra gente anda mezclada con el resto de la gente tanto en la ciudad como en la localidad. Entonces si nosotros vamos a hacer un allanamiento y llevamos la gente a cara descubierta, ya después no puede utilizar la misma gente para investigar. Ocurrió que cuando se hicieron los primeros allanamientos, se terminan los allanamientos y nosotros hicimos un procedimiento por tenencia de estupefacientes. Secuestramos algunas plantas de marihuana, ese expediente se manda al Juzgado Federal, y si el Juzgado Federal dispone que hay que investigar y yo tengo la gente a cara descubierta, no puedo mandar a nadie de los tengo a investigar porque ya todo el mundo los iba a reconocer. Por esa razón tenemos que trabajar a cara cubierta.
Trabajamos en ese momento y en todos los allanamientos que vamos a hacer por drogas, siempre trabajamos con la cara cubierta. El único que sabe estar con la cara descubierta soy yo que soy el jefe de la división y que soy una figura pública.

El querellante indagó al Jefe de la División Drogas, sobre los motivos por los que no se aseguraron de contar con el nombre correcto del propietario de la casa que allanaron en busca de las armas. Guzmán respondió:
- “En Corcovado no se puede hacer muchas preguntas. Hay mucha gente conocida de la gente de Bustos, mucha gente que le tiene miedo, muchísima gente que le tiene miedo, y hay muchos familiares de Bustos.

El Defensor le preguntó a su testigo cómo fue la intervención del GEOP en esos allanamientos. Guzmán sostuvo que:
- Rápido y no se escuchó… en algunos lugares la gente se asusta y grita… rápido no se escuchó gritos ni nada, pero fue muy rápido. Y rápido se mantuvo el lugar seguro así que nosotros también fue todo muy rápido como armamos el perímetro… Nosotros trabajamos mucho con el grupo GEOP. Para nosotros es el grupo elite, son la gente mejor preparada de la Institución. El Comisario Gómez creo que debe ser el policía que tenemos mejor preparado en la Institución. Todos sabemos la carrera que ha hecho, los cursos a nivel nacional y como ha salido… porque todos nos interesamos porque es un empleado nuestro y nos representa cuando va a otras provincias. En la división drogas cuando tenemos que hacer un procedimiento apelamos al grupo especial, jamás hemos tenido un inconveniente, jamás nos ha denunciado nadie…y eso que hemos tenido allanamientos mucho más complejos de lo que hicimos en Corcovado.”


FÉLIX NORBERTO ORTIGOZA

Yo participé en dos allanamientos que labré actas. En uno de la familia Bustos, de los padres de Mai Bustos que estaba prófugo en ese momento y también de Concepción Jaramillo. También después de eso fui comisionado por el Ministerio Público Fiscal para practicar investigaciones con respecto a Mai Bustos. Que si mal no recuerdo el Dr. Zacchino fue el doctor que me comisionó.
Por empezar lo viví mal porque el día que nació mi hija que fue el día 8 de marzo fue el día que mataron a este pibe, que pasó lo que pasó. Hubo que lamentar las víctimas de la familia Bustos que es un hecho desgraciado, y lamentar la muerte de este chico Roberts, que yo lo conocía, era un pibe de bien, educado que es para mi importante mencionar, cuando viene la educación de la casa. Ese día nos enteramos el tema este de Corcovado.
El jueves 12 diligencié dos allanamientos, el primero de ellos fue en la vivienda de la familia Bustos, del padre de Mai Bustos, que estaba sola la casa. Ahí secuestramos, si mal no recuerdo, un equipo de comunicaciones y creo que celulares. Ahí llegó también un familiar de la familia Bustos que consta en actas que se presentó. Pero la vivienda en principio estaba sola.
El segundo allanamiento que hicimos fue en la casa de Concepción Jaramillo. Primero autorizado esto por el Ministerio Fiscal y por el Juzgado. Se utilizaba el grupo especial en relación a los acontecimientos previo a esto que se había dado, el enfrentamiento armado. Se utilizó al grupo especial, primero ingresaron ellos y al cabo de 30 segundos mas o menos habremos ingresado nosotros. Somos recibidos por una abuela, que es Concepción Jaramillo. Una persona de avanzada edad. Le entregamos copia de la orden, se le explicó, después vino la hija de ella, que vivía en el mismo predio pero en una vivienda de atrás. Iniciamos la diligencia, se hizo presente el Dr. Falco con el Sr. Jefe de Policía en ese momento, el Comisario Ale. Secuestramos celulares en ese lugar, un calzoncillo con manchas hemáticas, presuntamente hemáticas, y un vehículo, un VW que en una de las alfombras tenía presuntas manchas hemáticas.
El ingreso del grupo especial fue rápido como dije, unos 30 segundos y después ellos se retiraron. No suscitaba peligro y tenían que realizar otras diligencias a parte de esa. Estaba asegurado el lugar. Las personas que estaban ahí estaban para mí en forma normal, no tuvimos problema, estuvimos tomando mate. La abuela estaba medio nerviosa, es entendible por la situación, ver tantos policías de golpe no es normal en Corcovado. Yo soy de Corcovado, por eso le digo, soy nacido en Corcovado. Así que la abuela, le trajimos un enfermero que le tomó la presión. Después se finalizó la diligencia.

Ortigoza sostuvo que de los allanamientos y de todo el operativo participaron policías de diferentes grupos. También resaltó que policías de diversos grupos circulaban encapuchados.

Corcovado es un pueblo muy peligroso. Nadie quiere verse involucrado, ni quieren testificar. Tienen miedo. Para que se de una idea, hay un policía Bravo que estuvo involucrado cuando mataron al Suboficial Principal Saez, hace muchos años en Corcovado, se tuvo que ir con su familia, vive en Rawson ahora porque le amenazaron a toda la familia. La idiosincrasia de Corcovado, como es la gente, no le importa si uno es policía o no, no tienen el respeto ese. Es más la hombría, si le heriste el honor y esperate cualquier cosa. Te van a buscar, y te van a encontrar, no hablan por hablar. Creo que hay pruebas suficientes, en un pueblito de dos mil habitantes ya mataron dos policía, hirieron de gravedad al Comisario Flores, hirieron de gravedad al hoy Comisario Tellería, lo que pasó con los Bustos… quién se iba a imaginar que iban a salir como en una película del oeste con armas y todo. Yo creo que eso no cabe en ningún lado. Y si hubieran llevado al grupo especial ahí – esto lo hablo como ciudadano – a ese hecho donde murió el policía y murió ese chico, creo que hoy no estaríamos lamentando ninguna muerte.

OMAR PAILACURA

A mi me convocó la URE, trabajaba en la comisaría de Trevelin, concurrí a esa localidad (Corcovado) con personal, allí me puse a disposición del Comisario Marinao quien coordinaba las diligencias a realizarse ese día.
En el primer momento de la diligencia se me ordenó circunscribir un sector del barrio, también con personal. Y luego se me designó a realizar un allanamiento en el domicilio de Rosalía Torres. Allí recuerdo que estaba el Dr. Falco, fiscal en ese momento, me dicen que tenía que hacer un allanamiento en ese domicilio, que tenía un testigo y que en primera instancia iba a tomar intervención el GEOP. Ahí no más estaba ya aproximándose el grupo del GEOP, intervienen ellos y yo permanezco a una distancia más o menos de diez metros, hasta que ellos tomen intervención, fueron escasos… casi un minuto en el domicilio ese y después intervine yo.
Prácticamente llegábamos en forma simultánea, más que nada en resguardo de la integridad física del testigo. Toma intervención el GEOP, irrumpe en el domicilio, ellos entran, escaso minuto, menos, y llaman al actuante, yo estaba en la calle.
Yo ingresé por la puerta de la cocina, al momento de ingresar tomé en cuenta lo que se había roto en principio. Estaba rota la puerta de ingreso de la cocina y del living-comedor, fue producto del ingreso del personal de operaciones. El Dr. Falco nos había dado directivas de que había que dejar constancia de lo que se había roto en su momento.

Pailacura sostuvo que una hora después lo convocaron a otro allanamiento en la casa de Leandro Rojas.

Cuando arribamos al lugar había más personal policial que estaba circunscribiendo el lugar, observando los movimientos en ese domicilio, desciende le grupo del GEOP y se desplazan hasta el domicilio. Yo como es mi estilo siempre tratar de observar lo que se hace para volcar al acta. Entonces me aproximo al domicilio para observar. Allí la intervención del GEOP duró un poquito más, un minuto y medio aproximadamente. Porque el patio recuerdo que tenía mucho pastizales altos, entonces el recorrido por la parte del fondo se demoró un poquito. Yo me aproximo hasta una parte y allí observo a uno de los integrantes del GEOP que hace seña que el lugar ya estaba liberado, solicitan al actuante.
Ahí entró el grupo del GEOP que son alrededor de ocho miembros. Y finalmente de su intervención solicitaron al actuante, yo le avisé que yo era el actuante y ahí tomo intervención. Ahí me encontré con dos masculinos y una mujer con un chiquito. La mujer andaba en la parte del frente, se desplazaba en la parte del patio de adelante, y después ingresó porque llamaba un nene. Después no la vi mas a la señora, la volví a ver cuando yo entro a la casa con la orden de allanamiento en la mano, que estaba dentro de la cocina con un nene. Yo recuerdo que entré con el testigo y pregunté por el responsable de la vivienda y me dicen ‘el responsable está ahí, en el patio adelante’. La persona estaba boca abajo en el piso, tirado. Entonces le digo ‘levantesé, acompañemé a ingresar a la casa’ y entra conmigo a la vivienda, donde yo lo identifico. Era Leandro Rojas.
Era poco amable, era reticente en darme sus datos identificatorios. Y la señora recuerdo que estaba sentada en un bloque con un nene en sus brazos, y después había otra persona más que decía que era gasista. Esta otra persona tampoco me quería dar sus datos porque me decía ‘yo estoy acá en forma circunstancial, vengo a hacer un trabajo que me contrató el dueño de casa’. Le dije que estaba haciendo una diligencia y sí o sí lo tengo que identificar.

Ante la consulta del defensor, Pailacura dijo recordar que en el procedimiento lo acompañaba una mujer (policía) y probablemente dos efectivos más.