martes, 18 de octubre de 2011

Operativos del GEOP en Corcovado


SE SUSPENDIÓ EL JUICIO POR DIEZ DÍAS

Era la segunda jornada de debate, varios testigos prestaron declaración y varios mas esperaban su turno, cuando el relato de una joven cambió todos los planes. Una de las víctimas dio detalles de lo sucedido en su casa y la Fiscalía amplió su acusación encuadrando los hechos en el delito de privación ilegal de la libertad con uso de violencia. El planteo fue acompañado por la querella. La oposición de la defensa no fue avalada por los jueces, el tribunal le dio diez días al defensor para que aporte nueva prueba en relación a este hecho.

Todo indicaba que se trataría de una nueva jornada extensa de declaraciones testimoniales. Pasaron por la sala víctimas, testigos de actuación ya hasta Leonardo Jarzún, del Programa Nacional de Lucha contra la Impunidad, Secretaría de DDHH del Ministerio de Justicia, Seguridad y Derechos Humanos de la Nación.
Sin embargo un testimonio lo cambió todo, evidenciando una vez más las particularidades del sistema de enjuiciamiento por audiencias orales y públicas. Como la prueba solo es tal al producirse durante el juicio, recién entonces se dan las declaraciones testimoniales, y estas no siempre se ajustan taxativamente a las entrevistas informales o al texto de las denuncias presentadas al inicio de la investigación. En este caso, lo que tal vez a la víctima pudiera parecer solo el aporte mas detallado de lo que le tocó vivir, produjo un cambio significativo en el curso del debate. Una nueva acusación obliga a dar también una nueva oportunidad de defensa al imputado, que en su momento no pudo presentar pruebas de descargo sobre el delito en cuestión. Y esto es lo que sucedió ahora generando un cuarto intermedio de diez días para la presentación de la prueba por parte de la defensa, con el consecuente viraje de las estrategias de las partes.