martes, 20 de noviembre de 2012

Nuevos hechos



HURTO:
Autores ignorados sustrajeron una bicicleta Zenith, azul y plata, en el Barrio Sargento Cabral, el sábado a las 22 hs.

HURTO:
Un vecino del Barrio Salud (Esquel) denunció que le sustrajeron una bicicleta del patio trasero de su vivienda, este martes a la madrugada.

TENTATIVA DE ROBO:
Autores ignorados rompieron una reja de la ventana posterior de una vivienda, revolvieron todo y dejaron preparado un TV para llevárselo pero no sustrajeron nada. Sucedió el lunes entre las 5:00 y las 18 hs., en Ameghino al 1500, Esquel.

HURTO:
Un vecino de Gualjaina denunció que le sustrajeron un rifle y una lata con monedas de su domicilio. Ocurrió el sábado por la tarde.

DAÑO:
Un vecino de Esquel denuncio que le forzaron la cerradura del lado del conductor y le rompieron el vidrio trasero.  Ocurrió entre la noche del domingo y la mañana del lunes.

HURTO:
Un joven denunció que se encuentra acampando en El Maitén, dejó sola la carpa y le sustrajeron la mochila con varias prendas de vestir y el cargador del celular. Sucedió el lunes al mediodía.

Estafa telefónica



Una nueva víctima cobró la ya conocida modalidad de estafas telefónicas en las que se anuncia mediante mensajes de texto la acreditación de importantes premios. En este caso un joven recibió un mensaje que le decía que había ganado una camioneta y debía comunicarse al teléfono desde el que se envió el mensaje. Llamó a un celular de Córdoba en el que le indicaron que había ganado un vehículo como premio dado por “la Presidenta”. A partir de esto le solicitaron el giro de una suma de dinero a través del Banco Nación, posteriormente le pidieron una nueva suma que también fue girada, y luego hubo una tercera petición, momento en el cual se alertó el damnificado y radicó la denuncia.

Las estafas

Los estafadores, hombres y mujeres, suelen operar desde teléfonos celulares con característica de Capital Federal (011) o de Córdoba (0351). Muchos de ellos se identifican como representantes o supervisores de empresas de telefonía y anuncian al sorprendido interlocutor que se hizo acreedor de un premio que va desde automóviles 0 Km, a LCD, pasando por todo tipo de artículos valiosos. Una vez convencida la víctima de la existencia del premio se le indican los pasos a seguir para concretar la entrega.

El interés del estafador

Logrado el engaño y la ilusión del futuro damnificado, el estafador le indica que deberá cubrir los gastos de envío de su premio, algo inusual que sin embargo no alcanza para alertar a muchas víctimas. El pago en estos casos se realiza fundamentalmente con tres modalidades: tarjetas telefónicas, depósitos en cuentas bancarias, tarjeta de crédito y pagos a través del correo.
El damnificado debe llamar a un número telefónico y para confirmar la operación y luego esperar a la fecha, normalmente inmediata, en que se le entregaría el premio en cuestión, con bombos platillos y cámaras de televisión. Llegado el día, no solo no llegará nada ni nadie, sino que en el teléfono, al que era tan fácil comunicarse, ya no lo atenderán, ni habrá forma de dar con la persona que lo estuvo operando.

Falso de principio a fin

El engaño se consigue y la impunidad también. Los estafadores tienen un sistema que les permite simular una operación real, aunque todo su contenido es falso. Los nombres que utilizan son ficticios, los datos del titular del celular son falseados y en los casos de depósitos por correo, la persona que va a retirar el dinero usa el documento de alguna persona de otra zona geográfica, no vinculada a la organización.

El momento de la denuncia

Las denuncias suelen llegar a la Fiscalía una vez que el damnificado se resigna a que fue estafado. Cuando eso ocurre es prácticamente imposible dar con el estafador ya que se cortó el único punto de contacto con él, la línea telefónica que no volverá a utilizar. Con los datos y documentación que el autor de la estafa utilizó en la operatoria, solo se llegará a varias otras personas que nada tienen que ver con la red de la estafa, ya que su identidad fue utilizada falsamente.

¿Qué hago si me llaman anunciándome que gané un premio?

Aquí les brindaremos algunas recomendaciones generales para no ser estafado con esta modalidad, pero también para ayudar a que no caigan otros.
  • No haga depósitos de dinero, tarjetas telefónicas o pagos con tarjeta de crédito para acceder a un premio, sin antes verificar con la compañía que supuestamente le otorga el premio, comunicándose a un teléfono o dirección fehaciente de la entidad (no uno suministrado telefónicamente, sino publicado en un sitio Web oficial o modalidad similar) de la efectiva existencia del premio en cuestión y que usted es el acreedor. Normalmente no se pide pago de ningún tipo para acceder a un premio. El solo pedido es motivo para sospechar una operatoria de estafa.
  • No acepte llamadas de cobro revertido a menos que sean de alguien conocido. El sistema de cobro revertido le avisa que usted tiene una llamada de... y a continuación le da el nombre de la persona que lo está llamando, siempre y cuando esa persona lo diga. Sin no le dan ningún nombre o el nombre que le facilitan no es de alguien conocido, no acepte el llamado, corte la comunicación; si la grabación le avisa que la llamada proviene de una penitenciaría, corte la comunicación.

  • Nunca brinde datos personales. En la mayoría de los casos, los estafadores intentan obtener datos personales referidos a familiares cercanos mediante distintas preguntas. Esa información la usan para hacerle creer a su víctima que tienen consigo a ese familiar.