jueves, 6 de marzo de 2014

Robo a Panificadora Esquel



EL VIERNES SE REALIZARÁ EL DEBATE POR LA PENA

Un nuevo tribunal será el encargado de analizar la pena a imponer a los imputados del robo a la Panificadora Esquel. Los cuatro fueron condenados en primera instancia. La defensa presentó un recurso ante la Cámara Penal y, si bien esta mantuvo la declaración de responsabilidad, mutó la calificación legal a la de robo agravado por la utilización de un arma cuya aptitud para el disparo no ha podido comprobarse. Las partes pugnarán por la definición de los jueces en un margen que va de 3 a 10 años de prisión.

El más joven de los imputados dio claras muestras de sus esfuerzos por reencaminar su vida, obteniendo importantes logros en la institución educativa a la que asistió. Su conducta lo hizo merecedor de un atenuante en la medida de coerción que se le dispuso. Jonathan Llanquetrú cumplía arresto domiciliario. Desde fines de diciembre se lo autorizó a trabajar bajo la tutela de quien sería su empleador en la localidad de El Maitén. Sin embargo el 6 de febrero su situación se modificaría rotundamente.

Aquel día el joven fue aprehendido por la policía de esa localidad, por estar presuntamente vinculado a un intento de robo, en el que el supuesto tutor habría sido su cómplice. En la audiencia de control de la detención y formalización de la investigación, se dispuso un mes de prisión preventiva en comisaría por este nuevo hecho y a pedido del fiscal Fernando Rivarola, se fijó audiencia para tratar la solicitud de revocatoria del arresto domiciliario que cumplía en relación al robo en la Panificadora.

Este jueves se llevó a cabo esa audiencia, presidida por el juez Martín O´ Connor. Martín Zacchino planteó los fundamentos del pedido de revocatoria de la medida por incumplimiento de las condiciones impuestas por el tribunal.
Los defensores Esther Cárdenas y Juan Zapata, esgrimieron que no existió tal incumplimiento y que la detención del imputado se produjo por portación de apellido y no por contar con pruebas en su contra. También sostuvieron que no existen riesgos procesales que exijan la continuidad de una medida tan gravosa como la que ahora reclama el fiscal, más aun al faltar solo un día para que se lleve a cabo el debate de cesura.

El juez resolvió revocar la medida y disponer la prisión preventiva de Llanquetrú hasta que su situación sea analizada por el nuevo tribunal de juicio. O' Connor aclaró que constatado un incumplimiento, el Código Penal lo obliga como juez a disponer el cese del beneficio y en eso se basa su decisión.

Llanquetrú pidió la palabra e hizo un alegato en su defensa, diciendo que el lunes tiene que volver a clases. Habló de lo bien que lo trataron en su escuela, de cómo confiaron en él y de los buenos resultados alcanzados. Sostuvo que es el abanderado y que este año egresa, no quiere que le impidan seguir con sus estudios. También dijo que el peor momento de su vida fue estar preso, "es un calvario estar adentro, es inhumano estar ahí adentro".
Estos planteos volverán a escucharse en el marco del nuevo debate por la pena ante un tribunal conformado por jueces de otras circunscripciones.