miércoles, 18 de mayo de 2011

Robo y privación de la libertad



PRISIÓN PREVENTIVA POR 30 DÍAS PARA LOS IMPUTADOS

Lo dispuso la Dra. Anabel Rodríguez a pedido de la Fiscalía. Los dos imputados por el robo a una estancia y el robo y privación de la libertad a un taxista, participaron este miércoles de una audiencia en la que se les dio a conocer la investigación penal en su contra y se dispuso su prisión preventiva por un plazo de 30 días, luego del cual se realizará una nueva audiencia para determinar si es necesaria la continuidad de la medida o puede ser morigerada. La fiscal María Bottini calificó los hechos como robo agravado por el uso de arma, privación ilegítima de la libertad calificada y robo calificado por el uso de arma de fuego.







El domingo pasado a las 05:00 horas, un taxista de la parada de Sarmiento y San Martín, fue abordado por dos personas jóvenes, Diego Miranda y Argentino Carlos Antilef quienes le solicitaron que los llevara a Trevelin. En el camino uno de ellos le dijo al otro “Che vamos a buscar los recados a La Esmeralda” y al llegar a Trevelin le piden ir hasta la estancia, por lo que siguen por Ruta 34 camino a Tecka. Pasados unos kilómetros le solicitaron bajar del taxi para orinar, se bajaron ellos y el taxista. Luego, al subir al taxi uno de los imputados lo apuntó con un arma de fuego en la cabeza y el otro lo amenazó con un cuchillo grande apoyándoselo en la panza. Le dijeron “hasta aquí llegaste”, lo hicieron bajar, le sustrajeron un celular y $500. Luego de esto le ataron las manos con una funda de los asientos; lo tiraron sobre el asiento de atrás y mientras uno conducía el otro apuntaba al taxista con el arma, continuando viaje por unos kilómetros más. Se detuvieron, bajaron a la víctima del auto, lo obligaron a arrodillarse en la ruta, cargaron varias cosas y previo amenazarlo lo dejaron en el lugar llevándose los asaltantes el taxi. El taxista logró llegar caminando a un puesto cercano donde pidió ayuda.
El vehículo fue encontrado, volcado, en el camino a La Hoya, totalmente dañado y con varios faltantes como el reloj, la rueda de auxilio y el barral identificador de taxi.

Hecho II

El empleado de la Estancia La Morocha denunció que el sábado, aproximadamente a las 19.00 horas, cuando se encontraba en el puesto cercano a la Ruta 34, salió a mirar porque ladraban los perros y una persona toda vestida de negro le dijo “levantá las manos” por lo que él se fue corriendo asustado. Según denunció, le dispararon con un arma de fuego, mientras escapaba, logrando llegar a Trevelin para hacer la denuncia. A 0:45 horas, personal de la comisaría de Trevelin llegó al puesto junto con el denunciante a realizar la inspección ocular del lugar, constatando que le sustrajeron cinco recados completos tipo monturas, cangallas, sogas, bastos, cojinillos y una motosierra Husquarna sin funcionar.
En allanamientos encontraron algunos de los objetos robados.

El contenido de la audiencia

La audiencia se realizo a pedido de la fiscal Bottini, por un lado para formalizar la imputación a los dos acusados y por otro para pedir medidas de coerción. Solo uno de los imputados se encontraba detenido por una orden solicitada por la fiscal y otorgada por la juez Rodríguez. El otro imputado había sido hallado con anterioridad y en relación a él se pudieron llevar a cabo varias medidas investigativas. Los dos asistieron a la audiencia representados por Omar López, defensor público.

Las medidas

Los fiscales Fernando Rivarola y Bottini fundamentaron el pedido de prisión preventiva por 60 días para ambos imputados, considerando que existe riesgo de fuga y de entorpecimiento procesal. La argumentación hizo hincapié en la gravedad de los hechos, fundamentalmente el que protagonizara el taxista, indicando que se trata de una modalidad delictiva inusual en la zona por su alto grado de violencia y por el modo de comisión, previéndose que de llegar a una condena esta será de cumplimiento efectivo.
Rivarola sostuvo que el modo en que procedieron con el taxista para ir a buscar los elementos robados en el primer hecho, da clara cuenta de hasta donde son capaces de llegar los imputados. Uno de ellos fue empleado de la estancia robada, y existen elementos que lo vinculan a un abigeato del que fuera víctima esta estancia tiempo atrás. La Dra. Bottini expuso varios argumentos tendientes a retratar el grado de peligrosidad de los imputados, fundamentalmente de su actitud violenta y de amedrentamiento mediante amenazas a las personas con las que tienen algún tipo de conflictos. Los acusadores pretendieron convencer a la juez de que si los imputados permanecieran en libertad podrían ocultar, modificar o distorsionar elementos de prueba necesarios para la etapa de juicio.

Inflacionaria

López arremetió vehementemente contra la fiscalía, sosteniendo que las calificaciones legales elegidas son inflacionarias y que no podrán ser sostenidas en juicio, fundamentalmente en lo que respecta al robo a la estancia, en relación al que pidió que se realice una pericia al arma de fuego para aclarar si fue utilizada.
Por otra parte consideró desmedidos los pedidos y sostuvo que ninguno de los argumentos llevados a la audiencia justifica aplicar una prisión preventiva. Finalmente pidió que se suplante esta por un arresto domiciliario con autorización para salir a trabajar, o bien por presentaciones periódicas en la Oficina Judicial.

Un mes

Luego de un cuarto intermedio, la juez dispuso la prisión preventiva de los dos imputados por la mitad del plazo solicitado por la fiscalía, indicando que en 30 días deberá realizarse una nueva audiencia para analizar si debe mantenerse la prisión preventiva o debe ser suplantada por alguna medida menos gravosa.
Para determinarlo consideró que en el caso de Antilef existe riesgo de fuga, y en ambos existen fundamentos para considerar que podrían entorpecer la investigación, por las características del hecho y por los antecedentes de conducta planteados por los representantes del Ministerio Fiscal. Ambos imputados permanecerán detenidos en la Comisaría Segunda, a menos que el juez de ejecución disponga su traslado a otra dependencia.
Para preservar la validez de medidas de prueba que se realizarán más adelante, se dispuso la prohibición de difundir los rostros de los imputados.