miércoles, 14 de mayo de 2014

Femicidio: Se abrió la etapa de juicio

Este miércoles se realizó la audiencia preliminar por el homicidio calificado de Cristina Cayecul y por el resto de las conductas desplegadas por el imputado el 21 de junio de 2013. Fue aceptada la acusación fiscal a la que adhirió la querella. También se admitió la prueba de la defensa. A pedido de la fiscalía el juez dispuso la continuidad de laprisión preventiva por peligro de fuga y entorpecimiento procesal.



La audiencia había sido fijada para una fecha anterior pero no pudo concretarse ya que una de las víctimas se constituyó en querellante y debió tratarse primero la admisión de dicha presentación, en esa audiencia y luego por dos jueces revisores. Finalmente este miércoles a las 9 hs. la fiscal Fernanda Révori expuso su acusación, extensa debido al despliegue de conductas que se le achacan al imputado.

El Dr. Alejandro Castillo, letrado patrocinante de la querella, adhirió a la acusación fiscal con toda la prueba presentada y en cuando a la descripción de los hechos únicamente en lo referido al tramo en que se vio involucrado el taxista.

El defensor Bruno Deias no tuvo cuestionamientos, y presentó su prueba también, compartiendo varios testigos propuestos por la fiscalía. Por su parte el imputado aceptó hablar, solo para decir que no sabe quién es el querellante y que "si le hice algo malo en lo que haya pasado, le quiero pedir disculpas, porque no sé lo que pasó ahí…".



Los sucesos trágicos del 21 de junio



Eran aproximadamente las 20.30 horas, estaba oscuro. El imputado dejó estacionado su automóvil del otro lado de un baldío y caminó 200 mts hacia el domicilio que alquilaba su ex pareja,  Cristina Veatriz Cayecul en el Barrio Baden I. Sabía que no estaban sus hijos. Llevaba entre sus prendas un revólver calibre 22 largo marca Doberman. Traspuso un portón de rejas que estaba cerrado con candado e irrumpió en la vivienda. La acusación fiscal indica que allí la habría agredido primero con sus manos y con la utilización de un alambre, para finalmente extraer el arma y dispararle al cuerpo de la mujer en varias oportunidades, impactando seis proyectiles, lo que le provocó la muerte. "Cabe resaltar que el acusado había protagonizado anteriormente situaciones de violencia familiar para con la víctima, madre de sus dos hijos, de quien se hallaba separado desde principios del mes de enero de 2013."

 

Antes de morir, Cristina gritó pidiendo ayuda. Su vecino escuchó y salió a socorrerla, sin embargo solo logró acercarse al portón de acceso a la vivienda cuando se topó con la mirada intimidatoria del agresor que lo apuntaba con el arma de fuego. Frente a esta actitud el hombre se tiró inmediatamente al piso desde donde escuchó el primer disparo y huyó rápidamente a su vivienda tratando de protegerse.



Minutos más tarde, el imputado emprendía su huida. Tomó un taxi en la parada del Casino, con la excusa de alcanzar el colectivo que viaja a Trevelin, pero al completar el recorrido sin haberlo interceptado, le pidió al chofer que lo alcance al puente del camino a Aldea Escolar. Fue entonces cuando exhibió el arma de fuego y le anunció que  si no quería tener problemas lo lleve hasta La Aldea ya que él era quien había matado a la mujer en Esquel. El taxista se resistió y el imputado le gatilló tres o cuatro veces sin que se dispare ningún proyectil. En ningún momento dejó de apuntarlo, ni siquiera cuando se puso a forcejear por el control del volante. El vehículo colisionó contra el cerco perimetral de un campo lindero a la ruta. El taxista logró arrebatarle el arma y el imputado se dio a la fuga para luego esconderse en el domicilio de quien sería su novia. Allí fue aprehendido a las 19.00 horas del día 22.



Révori calificó los hechos como constitutivos de homicidio calificado por el vínculo con la víctima, por tratarse de un hecho de violencia de género y por su comisión con el empleo de un arma de fuego, en concurso ideal con portación ilegal de arma de fuego de uso civil, en concurso real con coacción agravada por el uso de arma en concurso real con tentativa de homicidio criminis causa cometido con empleo de arma de fuego.



La discusión de la prisión preventiva



La fiscalía expuso los motivos para mantener la medida cautelar no solo por el riesgo procesal de amedrentamiento de testigos, sino por peligro de fuga. Para la Dra. Révori, el imputado no tiene suficiente arraigo frente a la expectativa de pena que pesa en su contra.

Por su parte el defensor Bruno Deias planteó que no se opondría a la medida, pese a que no comparte el análisis realizado por la fiscal. Para la defensa el imputado está en una situación muy delicada, realizando tratamiento psicológico y habiendo recibido amenazas respecto de su persona.

José Colabelli decidió mantener la medida de coerción fundamentalmente por peligro de fuga. El magistrado tuvo muy en cuenta la gravedad de los delitos que se imputan, los elementos que existen para achacarlos al imputado y la conducta que este mantuvo no solo al momento de realizar estos hechos, sino también con anterioridad, desobedeciendo reiteradas veces las prohibiciones impuestas por el fuero de familia.