Incendio y Psicotrauma

INDICADORES DEL TRAUMA Y PRIMEROS AUXILIOS

El Servicio de Asistencia a la Víctima del Delito junto a SEROS, aporta herramientas de psicoeducación a brigadistas en Cholila. Se prevé aplicar una serie test a los brigadistas en los centros de recambio para obtener diagnósticos.

En 2013 un grupo de profesionales de la salud mental y del SAVD recibió formación integral teórico asistencial para sobrevivientes de traumas psicológicos, en un curso financiado por SEROS y brindado por la Sociedad Argentina de Psicotrauma, la que está inscripta en la Asociación Mexicana para ayuda en psicocrisis. La formación incluyó el protocolo grupal e integrativo con EMDR.

Los incendios registrados en la cordillera, fundamentalmente el incendio de Cholila, constituyen eventos traumáticos que pueden afectar la psiquis de quienes trabajan en su combate y de los afectados directa o indirectamente. Con la coordinación del Dr. Jose Luis Pérez de Pedro, profesionales de SEROS y del SAVD, quieren brindar información a las personas que se encuentran en esta situación para que sepan que pueden experimentar una serie de signos en sus pensamientos, sentimientos y conductas aparentemente anormales. Tal anormalidad es solo aparente, ya que su presencia es esperable ante un evento anormal como el que se está viviendo.

El evento traumático

Un evento traumático es una situación anormal en la que está en riesgo la propia vida, los bienes o la vida de personas cercanas. Este incendio es una catástrofe y produce signos, y síntomas  sobre todo en los brigadistas, combatientes, en la población y en otras personas que se ven afectadas de alguna manera.

¿Cómo identificar la sintomatología? Se trata de hechos, pensamientos, sentimientos normales ante una situación de crisis. El psiquismo se defiende generando conductas. Como en todo evento cada persona se verá afectada de modo singular, diferente a otras.

Expertos dispuestos a asistir

Es importante que se sepa que en todos los hospitales hay personas formadas. El director de Salud Mental de SEROS fue coordinador del curso de especialización y conoce perfectamente de qué se trata la crisis y el trauma. Además hay un grupo joven de psicólogos especializados en toda la provincia.

Hay soluciones, hay recursos para todos los que lo necesiten, tengan o no obra social. En todos los hospitales y centros de salud hay un referente de estos equipos y los profesionales del SAVD están formados en psicotrauma y dispuestos a brindar asistencia a quien lo solicite.

Es necesario tratar la sintomatología psíquica de ansiedad, insomnio y otras para encontrar soluciones concretas a los perjuicios que haya sufrido a raíz del incendio. De otro modo esta afectación va a repercutir negativamente en la toma de decisiones y en la búsqueda de soluciones. Es muy importante que la catástrofe no nos enferme psíquicamente y si eso ocurre, aliviar los síntomas de manera inmediata y de ser necesario, recurrir a la gente preparada.

Para prevenir y minimizar estos efectos la información sobre el estado del incendio debe tener características específicas: 1. Informante único. 2. Especializado   3. Debe ser Veraz, Clara, Confiable, Verificable, Adecuada y Congruente. Esto es lo primero que debe tener en claro el Comité de Crisis. Por su parte la población debe apelar solo a una fuente de información confiable, la que proviene del lugar. Esto provoca menos síntomas de ansiedad.

Indicadores

En los adultos puede presentarse:

-          Confusión para pensar

-          Problemas para dormir o descansar

-          Disminución en la resistencia contra enfermedades

-          Sentimiento de impotencia

-          Sentirse aislado. Abandonado

-          Sentirse frio emocionalmente

-          Intensa preocupación por otros

-          Temblores musculares

-          Taquicardia

-          Culpabilidad por haber sobrevivido

-          Problemas de concentración

-          Problemas de memoria

-          Disminución de la higiene personal

-          Pérdida de confianza en uno mismo

-          Recuerdos muy vivos del evento

-          Culpar a los demás

-          Desorientación en tiempo o lugar

-          Abuso de alcohol o drogas

-          Problemas en el trabajo/familia/escuela

-          Necesidad de estar solo

-          Ideas de suicidio

-          Dificultades para retornar al nivel normal de actividad

-          Sentirse abrumado

-          Nausea. Dolores de pecho o cabeza

-          Dificultad para respirar

-          Sentimientos de angustia, vulnerabilidad, frustración impotencia, enojo, desesperanza, tristeza, miedo, pánico, inseguridad, irritabilidad.

Qué debe hacer si está afectado

-          Hablar con la gente cuando lo necesite, compartir sus sentimientos y pensamientos con otros.

-          Pasar tiempo con otras personas, buscar compañía. Prestar su compañía y escuchar a sus compañeros

-          Saber que lo que le ocurre es normal ante un evento anormal

-          Darse permiso para sentirse mal

-          Realizar ejercicios suaves alternados con relajación

-          Darse permiso de sentirse mal

-          Estructurar el propio tiempo, mantenerse ocupado

-          No tratar de disminuir el dolor con uso de drogas o alcohol

-          Escribir durante las horas de insomnio

-          Hacer o pensar cosas que lo hagan sentir bien

-          Descansar lo suficiente para recuperar fuerzas

-          Comer balanceada y regularmente

Qué deben hacer los familiares y amigos de los afectados directamente

-          Pasa tiempo con la persona afectada

-          Ofrece tu ayuda y atención para escucharlo detenidamente

-          Asegúrales que ya están a salvo (si esto es realidad)

-          Ayúdales con las tareas diarias como limpiar, cocinar, cuidar a la familia y a los niños

-          Darles privacía

-          Permitirles llorar y estar tristes

-          No te tomes como cosa personal su enojo u otros sentimientos

Primeros auxilios generales para ayudar a los niños después de un evento traumático

-          Abrácelos con amor y respeto frecuentemente

-          Pase tiempo con sus niños, especialmente antes de que se duerman

-          Reafírmeles frecuentemente que están juntos a salvo

-          Hable con ellos sobre el desastre de una forma simple y honesta. No minimice ni exagere la situación. Manténgalos informados de cualquier problema que los pueda afectar directamente

-          Pregúnteles acerca de sus sentimientos sobre el desastre. Anímelos a que hablen sobre cómo se sienten, sobre sus miedos y preocupaciones, sobre lo que piensan. Si ellos no quieren hablar, pregúnteles cómo piensan ellos que otros niños se sienten.

-          Dígales a los niños como se sintió usted durante el desastre. Encontrará que sus sentimientos son compartidos por ellos, a pesar de su corta edad.

-          No les hable a los niños de los miedos de usted al futuro. Es importante para ellos que los adultos se muestren seguros o esperanzados de poder salir adelante

-          No descargue en los niños sus miedos. No los mantenga a su lado o duerma con ellos, por ser usted quien tiene miedo.

-          Acepte los sentimientos de sus niños. Si su hijo se siente con ganas de llorar, dígale que está bien que llore y exprese sus sentimientos. No intente cambiar los sentimientos de sus hijos. Sea un buen oyente.

-          Anímese a que dibujen, coloreen, escriban o jueguen acerca del desastre. Esto le ayudará al os niños y usted entenderá como ven ellos lo sucedido.

-          Cuando hagan juegos referentes al desastre, anímelos a que les den al juego un final feliz, pues ellos están a salvo

-          Mantenga las rutinas familiares en la medida de lo posible. Haga cosas conocidas para los niños por ej. Contarles un cuento antes de dormir, que duerman la siesta en la tarde. Esto les proporcionará un sentido de seguridad.

-          De a sus hijos tareas productivas y apropiadas a su edad. Hágalos parte del esfuerzo familiar para responder a la adversidad.

-          Reconozca y premie con palabras de aceptación, cuando los niños se comportan responsablemente

-          Tolere durante un tiempo (3 a 4 semanas) los comportamientos regresivos o agresivos.

-          No les haga a sus niños promesas que no pueda cumplir

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Si hay evidencia de deterioro o disfunción llevar a la persona al centro de salud de su localidad